La primera sugerencia que me he permitido trasladarle es tomar en cuenta que usted ya no es un C.C.C. (ciudadano común y corriente), por eso no deberá extrañarle que a estas alturas le estén apareciendo parientes y «amigos del alma» por todos lados. Por su nueva situación muchos podrían ahora argumentar ser descendientes de Cristóbal Colom, por ende alegar ser sus parientes y ante tales circunstancias el Mateo Flores no le alcanzaría para atender a toda la familia. Así que hasta en términos jocosos le dejo tácita mi recomendación de la importancia para el país de manejar de la manera más provechosa su tiempo. Sobre el segundo punto, que es convocar a un pacto de gobernabilidad veo que ya lo hizo, y el propósito principal debe ser comprometer y hacerle entender a la sociedad que el país no es únicamente responsabilidad del Presidente y su equipo, sino de todos los ciudadanos. Este pacto debe desarrollarse en un ambiente de convivencia pacífica para permitir estudiar en un tiempo perentorio todas las opciones que nos beneficien como país, y con el compromiso de todos los sectores se puedan ejecutar las políticas públicas que busquen el beneficio de toda la población.
Si se da cuenta, éste podría constituirse en un compromiso que se traduzca en el apoyo de la sociedad hacia su gestión presidencial, situación que le cerraría el espacio a esa oposición destructiva y resentida que estaría aguardándole en el Legislativo, por eso mismo le sugiero no excluir a ningún partido político de este convenio. Como aquí lo que se pretende es el beneficio del país, el boicot que se pueda dar a ese gran acuerdo nacional quedará mal visto por la ciudadanía, acciones que llevarían a ese grupo opositor a cavar su propia tumba política. Por eso le insisto que el principal factor que sustentará su gestión presidencial es el apoyo que tenga de la sociedad, de ahí mi recomendación de mantener un apego irrestricto a la moral y un vigoroso impulso a sus principales políticas públicas. Otra cosa fundamental que le invito a recordar, es que en estos momentos el concepto de gobernar rebasa lo tradicional, es decir, la buena conducción, asistencia, prevención y cualquier servicio de beneficio general, esto debido a que nos encontramos en un momento crucial para el país, pues no olvidemos que Guatemala se encuentra atravesando una profunda crisis social e institucional debido a que el sistema político actual no ha llenado las expectativas de bienestar y desarrollo en la población. En este sentido permítame también recomendarle una agenda fundamentada sobre la intención de alcanzar una democracia vinculada al desarrollo, y en esto muchos en el país estamos claros que solamente lo vamos a lograr por la vía de una reforma política estructural, con enmiendas que apunten a la reestructuración del Estado y que se encuentren orientadas fundamentalmente a garantizar la eficacia, transparencia, estabilidad y gobernabilidad en la gestión pública. El inicio de esto lo estaremos distinguiendo cuando logremos mejorar la calidad de nuestros representantes. ¿Pues que le hemos generado al país con un Congreso donde también pululan ladrones de gasolina, narcos, semianalfabetos y viajeros derrochadores? Por su récord profesional sé que usted ya ha estado en varios países desarrollados y por eso mismo ya habrá identificado que esa alta calidad de legisladores está vinculada al desarrollo, de ahí la importancia de llevar a nuestro Legislativo la mejor calidad humana de nuestra sociedad. Continuará…