Por correo electrónico recibí dos interesantes documentos que quedan como anillo al dedo ahora que nos encontramos a escasos dos meses de las elecciones generales, Calidad Humana, y la Búsqueda de los Valores. Principios elementales que debemos mantener.
valerioasecovir@yahoo.com
Mucho se habla de calidad de productos, de calidad de procesos, calidad de servicios, calidad de sistemas, etc. Muy pocos hablan de calidad humana, de calidad de vida… Y sin ella, todo lo demás es apariencia, no tiene fundamento. Hablar de calidad humana es cuidar nuestros vínculos con los demás. Necesitamos rehacer nuestros vínculos humanos.
Ni las cosas, ni el dinero, poseen valor intrínseco El valor de lo material está en su aplicación, en el servicio a alguien más, o la convivencia con alguien más. La belleza de tener está en compartir. Parte de la naturaleza humana es poder dar, convivir, amar, servir y ayudar.
Un ciudadano de cualquier tiempo y lugar, siempre ha deseado un Estado que gobierne justamente, es decir, busca en ello el valor de la justicia, le es imperioso creer en sus gobernantes y finca sus esperanzas al emitir su voto, por lo que busca en ellos responsabilidad y congruencia, pero esto no sólo lo busca de sus gobernantes, lo quiere en todos los ámbitos de su vida, por ejemplo lo desea en el hogar donde uno espera amor, comprensión; con sus amigos donde se busca solidaridad; en su trabajo donde uno trata de encontrar entrega, motivación, reconocimiento, lealtad; en el deporte desea uno imparcialidad, sacrificio y así sucesivamente en las demás actividades que realiza, es algo que desea tanto recibir como dar, ya que los valores no es algo que se posee solamente, sino algo que al tenerlo lo hace a uno ser mejor cuando se practica y se comparte haciendo el bien a los demás.
El valor es y será siempre, no puede haber una verdad para mí y otra para ti, lo bueno no pudo haber sido ayer y ahora no, los valores existen primero en el ser y se concretizan en él perfeccionándole a cumplir el fin para el que fue hecho. Por todo esto, resulta necesario que ante tanta confusión que impera en la actualidad sobre lo que realmente es un valor, se reafirme el enorme compromiso que existe en las instituciones para contribuir a esa tarea enorme de buscar incesantemente los valores, los valores trascendentes, aquellos que hacen al hombre cumplir el fin por el que fue creado.
Es imperativo que los ciudadanos tomemos conciencia al momento de depositar nuestro voto, cuando ejerzamos ese derecho lo hagamos con honestidad, seriedad y objetividad, en donde los valores humanos prevalezcan sobre los demás, votemos por el equipo que consideremos que llena nuestras aspiraciones y no se basa en promesas falsas e irrealizables.