Maestros, agua, y Canil


Debo confesar que ya tení­a escrita la columna del martes sobre los temas comunes de criminalidad e impunidad, pero después, en vista de que ya hay abundancia de criterios sobre estos asuntos, preferí­, debido a lo reducido del espacio, tratar tres temas totalmente diferentes.

Héctor Luna Troccoli

MAESTROS. Para apartarme un poco de la conocida frase del gran maestro, escritor y revolucionario José Martí­, quiero citar a un genio universal que quizás algunos maestros han oí­do mencionar y que escribió dos libros con muchos rasgos autobiográficos: se llamaba Albert Einstein quien en su obra «Como veo el mundo» escribió: «El arte más importante del maestro es provocar la alegrí­a en la acción creadora y el conocimiento» y luego en su obra «De mis últimos años» afirmó: «Lo peor es educar por métodos basados en el temor, la fuerza y la autoridad, porque se destruye la sinceridad y la confianza y sólo se consigue una falsa sumisión».

Joviel Acevedo y compañeros, incluyendo Nery Barrios, actualmente en prisión, indudablemente no tienen la categorí­a de un Martí­ o de un Einstein y predican, hacen, actúan y disponen todo lo contrario de lo que estos dos grandes hombres predicaron y nunca pasarán de ser dirigentes de lo negativo y ejemplo de la antitesis de la verdadera educación, fuera, por supuesto, de no trabajar y obtener privilegios. Como guatemalteco me da tristeza ver a una parte del magisterio actual (que no son todos), quienes pese a confiárseles una misión sagrada, la tiran a la basura y a las cloacas, en desmedro de niños y niñas de escasos recursos.

Creo que para solicitar y exigir, hay otras formas y métodos, siempre que se tengan dos cosas: inteligencia y sentido común.

AGUA. Siempre he sido simpatizante de los movimientos ecologistas y de las personas que ponen su vida al servicio de esa causa. La humanidad se está destruyendo y particularmente está dejando sin el recurso agua al mundo.

Disiento del criterio de la Biblia que afirma que el hombre fue hecho a imagen y semejanza a Dios y mas bien me inclino por lo que dice Calderón de la Barca en su obra «La vida es sueño», sobre que el delito mayor del hombre es haber nacido, porque si se nace para destruir lo bueno y maravilloso que nos da la naturaleza precisamente para poder vivir, estamos por debajo de los llamados animales que no destruyen por ganar dinero u otros motivos, sino para sobrevivir. «Guatemaltecos y Guatemaltecas», ya sabemos que nos estamos quedando sin agua, pero ya no lo digan: ¡hagan algo!

CANIL. Felicito a don íngel Canil, esposo de la señora Rigoberta Menchú por su comportamiento, actitud y expresiones sensatas según información del domingo en Prensa Libre, relacionadas con la candidatura presidencial de su esposa. Demostró con eso que hay personas que al ser entrevistadas o dar a conocer su opinión, lo hacen sin adornarlas con estupideces o pendejadas. De nuevo, mis respetos…