¿Y la dignidad del Estado de Guatemala?


Uno de los últimos acontecimientos que han sacudido el alma de los guatemaltecos, ha sido el asesinato de los diputados salvadoreños y su piloto con el agregado del asesinato de los policí­as nacionales civiles.

Fernando Mollinedo

Lo anterior, puso de manifiesto las tremendas fallas administrativas, cualitativas, técnicas y polí­ticas del sistema de gobierno guatemalteco; y por ende, dejó al descubierto los mayúsculos errores de gobernar sin tecnócratas que indiquen, hagan y practiquen el ejercicio gubernamental sobre bases ciertas y de carácter cientí­fico.

En Guatemala, casi todos los gobernantes han demostrado que llegar al poder les ha significado un cheque en blanco para el pago de facturas polí­ticas, utilizando los «servicios» de personas ignorantes, iletrados e inexpertos que han aplicado su «lógica común» para la resolución de problemas que requieren una interpretación de carácter técnico.

Las constantes «boqueras» del Presidente salvadoreño -justificadas por cierto- lo han hecho caer en un plano común y normal, sin tener la visión de reclamar por los conductos oficiales y un lenguaje adecuado que concuerde con su alta investidura. El Presidente guatemalteco por su parte, aceptó de forma tácita la responsabilidad institucional por ese crimen; al grado que se le ve sumiso y «ahuevado» ante su homólogo salvadoreño, aceptando la sarta de «boqueras» que a todo pulmón le lanza el señor «Toni» Saca.

El cargo de PRESIDENTE DE LA REPíšBLICA DE GUATEMALA tiene inmersa por sí­ mismo, la excelencia de LA DIGNIDAD; sin embargo, el señor í“scar Berger como que no sabe de qué se trata eso de DIGNIDAD y su conducta dicharachera e informal le ha dado un significado de vulgaridad a tan elevada investidura. Dignatario, es una persona investida de una dignidad; y la palabra significa tener la cualidad de digno, Excelencia y Decoro de las personas en la manera de comportarse, con ocasión de ejercer cargo o empleo honorí­fico y de autoridad.

La DIGNIDAD DEL ESTADO DE GUATEMALA está por los suelos, porque nuestro Presidente y algunos (as) diputados (as) han permitido actos que lesionan la DIGNIDAD y la SOBERANíA DEL PUEBLO GUATEMALTECO? y para ejemplificarlo cito los siguientes actos: 1) Permanencia de un contingente de ejército extranjero en el departamento de San Marcos, el cual so pretexto de ayuda médica ejerce controles de la población para efectos de combate al narcotráfico; 2) Humillación por parte de agentes policiales estadounidenses al «cachear» a los Ministros que asistieron al Palacio Nacional a la cena ofrecida por el Presidente de Guatemala en honor del Presidente de los Estados Unidos de América.

3) Violación flagrante a la ley guatemalteca por los policí­as estadounidenses que impusieron su «autoridad imperial» restringiendo la libre circulación de los habitantes de ciudad Guatemala y Chimaltenango, SIN QUE NINGUNA AUTORIDAD GUATEMALTECA HAYA PROTESTADO. 4) Y como corolario, nuestras autoridades PERMITIERON A LA POLICíA NACIONAL CIVIL DE EL SALVADOR y FISCALES DEL MINISTERIO PíšBLICO DE EL SALVADOR realizar trabajos de investigación criminal de campo y administrativa en instituciones de seguridad.

¿Quién vela por que se RESPETE la DIGNIDAD Y SOBERANíA DEL ESTADO DE GUATEMALA? ¿Cree usted que sea el Presidente de la República? ¡QUE VA!, ¿Valdrí­a la pena preguntarle si también a él lo «cachearon los polis estadounidenses? Y dónde está la protesta de los «lí­deres» de los partidos polí­ticos que se rasgan las vestiduras por el pueblo de Guatemala?