De hecho se inició la campaña electoral que en este año se realizará en el mes de septiembre; siempre y cuando así lo permita la forma en que ésta se desarrolle; me refiero a los aspectos de violencia e intolerancia, que presagia será uno de los ingredientes nefastos en esta justa electoral.
Se destaparon ya, las intenciones y ambiciones de muchas personas para figurar en las planillas de elección popular; la mayoría de ellas con un pasado político que es el perfil conocido en sus comunidades, ya sea por sus bondades, por su inocuidad o su peligrosidad social. Cada organización política está definiendo a sus candidatos dependiendo de la cantidad de dinero que aporte para la campaña presidencial y aparte lo que invierta en su campaña personal.
De esa cuenta, ya es sabido en Guatemala que, la mayoría de candidatos a puestos de elección popular son personas que «invierten» hoy para «compensar» en una mañana muy cercano; es decir, que su inversión les promete una jugosa recompensa con fondos del Estado. Esa es sin más ni menos, la realidad política de Guatemala.
Algunos medios de comunicación han publicado entrevistas con personajes de la política nacional, mostrando su pasado tenebroso, y esto de forma velada se convierte en un llamado a no votar por él, ya que permite a los electores conocer en forma general los objetivos inmediatos o «compensatorios» que persiguen.
La mayoría de estos personajes, arrastran en su vida el estigma de ser considerados (as), LADRONES, ESTAFADORES, VIOLADORES, HAMPONES, ASESINOS, MENTIROSOS, DEFRAUDADORES AL FISCO, IGNORANTES, ILETRADOS, INCULTOS, y algunos otros estereotipos que los hacen pintorescos, bufones, temidos, aceptados y/o alabados.
Para conseguir el poder, estos personajes, hombres y mujeres, utilizan argumentaciones baladíes, promesas, mentiras afirmaciones incongruentes, y sobre todo, una gran dosis de hipocresía; recurriendo a la utilización de veladas amenazas, implantación del terror social y no dejan en el olvido, la coacción.
Alcanzar el poder, es su objetivo fundamental; para ello no escatiman utilizar conductas ilícitas de todo tipo, con las cuales pretenden promocionar valores éticos que ellos (as) jamás podrán exhibir ante los votantes, siendo un nefasto ejemplo para la población joven de Guatemala, de cómo utilizar la ilegalidad para acceder la poder.
La carrera se inició, ahora es de esperar la avalancha de muertos, las declaraciones insulsas y vacías de cuanto idiota pretenda llegar a ejercer el poder en Guatemala. El significado de la palabra IDIOTA según el DRAE: Palabra devenida del idioma latín idiota, y ésta del idioma griego Cdií«thj «Que padece de idiocia. Que carece de toda instrucción. Persona engreída sin fundamento para ello. íšsase también como adjetivo familiar para indicar: Tonto, Corto de entendimiento».