valerioasecovir@yahoo.com
El reto de asumir la conducción del Ministerio de Salud en la actual coyuntura requiere conocimientos técnicos, apoyo político y, sobre todo valor para enfrentar las adversidades.
El Dr. Víctor Manuel Gutiérrez Longo asumió dicha responsabilidad con un sistema de salud con problemas financieros serios, en la recta final de un período de gobierno, que implica grandes dificultades para lograr consensos y, si fuera poco, enfrentando un conflicto con los médicos del sistema que se ha prolongado durante cinco meses.
Si bien es cierto, la inversión en salud es totalmente insuficiente y los servicios de salud no responden a las necesidades de la población, es importante valorar que en Guatemala aún existen profesionales de la medicina comprometidos con los cambios estructurales impostergables en el sistema de salud. El ministro ha incorporado a su equipo de trabajo, al Dr. Juan Antonio Villeda, como Director General del Sistema Integral de Atención en Salud, quien, como mencioné en mi columna del 31 de marzo del 2005, estuvo promoviendo en la extinta írea de Salud Guatemala la respuesta a las necesidades de salud con una red de servicios en los diferentes niveles de atención. ¡Qué diferente fuera la situación actual si el enfoque que conocimos en esa época hubiese continuado!
Recuerdo que en la columna mencionada, hacía un relato que los hospitales cubanos no tenían un equipamiento tecnológico muy sofisticado, sin embargo sus condiciones de salud son notoriamente diferentes a las nuestras, porque se ha invertido en la prevención como una cultura social. Incluso llegué a predecir el colapso de los hospitales nacionales, si no se tomaban acciones como las propuestas en su oportunidad por el Dr. Villeda y su equipo.
La esperanza de mejorar nuestra situación de salud renace cuando vemos el enfoque que se le está dando de nuevo a la gestión del Ministerio de Salud, lo cual trataré en futuro artículo.
Hoy me refiero y me adhiero al llamado que hacen las autoridades de Salud Pública a sus colegas médicos, a quienes hay que reconocer su participación en un movimiento de sensibilización social, pero que a estas alturas del conflicto deben ver más allá de soluciones en el corto plazo y unir esfuerzos en la reestructuración del sistema de salud que ha anunciado el Presidente de la República y que el Ministro de Salud Pública y su equipo han dado a conocer a todos los cuadros dirigenciales, en sendas reuniones a las que he asistido como observador.
En estas reuniones se ha hecho énfasis no solamente en la reestructuración de los hospitales, no solamente en seguir invirtiendo en curar las enfermedades, se habla de reestructurar el sistema de salud en su integralidad, acorde al contenido de los Acuerdos de Paz y a la Agenda Nacional de Salud incluida en el Plan Visión de País.