Señalan anomalí­as


De acuerdo con el movimiento social, la CICIG no sólo combatirí­a crí­menes de la delincuencia

Ayer, en conferencia de prensa, diversas organizaciones sociales de defensa de los derechos humanos, señalaron poco interés para la aprobación de la CICIG, pues, según ellos, existen varios «impedimentos» dentro del Estado para poder aprobarla.

Mario Cordero
mcordero@lahora.com.gt

De acuerdo con Claudia Samayoa, de la Unidad de Defensores y Defensoras de Derechos Humanos, del Movimiento Nacional de Derechos Humanos, el movimiento social busca crear presión para que se apruebe la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).

Según el movimiento social, existen intereses ocultos para que el Estado de Guatemala continúe con los mismos problemas para investigar y castigar las actividades ilí­citas, pues Guatemala se ha convertido en una pieza clave para delitos de crimen organizado a nivel mundial.

Samayoa indicó que desde el conflicto armado interno, los poderes paralelos se incrustaron dentro del Estado; a raí­z de la Firma de la Paz, se ha tratado de «sacar» a este poder paralelo, lo cual ha provocado una reacción de parte de los grupos ocultos.

Sin embargo, señala Samayoa, se ha notado en los últimos ocho años, un rebrote de las actividades ilí­citas. Entre estas, se han señalado: el contrabando de mercaderí­a, el tráfico de armas, la trata de personas y de niños, y, por supuesto, el narcotráfico.

Indica la activista consultada que Guatemala se ha convertido en una especie de territorio en donde cobran sentido todos los ilí­citos.

Tráfico de armas

Por ejemplo, recordó que la semana pasada el Centro Internacional para las Investigaciones en Derechos Humanos (CIIDH) presentó información, en donde a Guatemala se le está ligando en un escándalo internacional de tráfico de armas, luego de que el sirio Monzer al Kassar fuera capturado en España con arsenal valorado en millones de dólares, el cual habí­a sido legalizado en Guatemala.

«Esto demuestra que el Estado ha favorecido la legalización de ilí­citos», señala Samayoa.

Robo de niños

En cuanto al robo de niños que se ha visto más constantemente en los últimos años, Samayoa comentó que este ilí­cito es histórico dentro del paí­s. «Lo que pasa es que los medios de comunicación los ha hecho más visibles en los últimos tiempos, pero eso siempre ha existido». Por esta razón, el fenómeno del robo de niños no ha aumentado, pero la percepción pública ha hecho pensar que sí­.

Delincuencia globalizada

Además, indicó que en el tema de la CICIG, no sólo hay intereses de parte de grupos que no desean que se les investigue de hechos relacionados con el pasado inmediato, durante el conflicto armado interno. «También hay intereses internacionales para que no se apruebe.»

De esa forma, estableció que la delincuencia se encuentra globalizada, pues los ilí­citos se refieren básicamente a tráfico de distintas «mercaderí­as» prohibidas, como personas, drogas, armas, etc., que no se quedan en Guatemala, sino que sólo se legalizan acá.

Migraciones

Precisamente, en otra información, la Interpol señaló hoy que existen «numerosas» redes criminales de inmigración clandestina que hacen pagar miles de dólares a los iraquí­es que quieren dejar su paí­s para instalarse en Estados Unidos, Australia o Suecia.

De la investigación realizada por la Interpol, «Hemos identificado más de una decena de casos diferentes hasta el momento. Pero es seguro que existen muchas redes», declaró Ralph Markert, encargado de la coordinación de la investigación de Interpol, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias AFP.

La ruta que supuestamente han rastreado, en la que se trasladan los grandes grupos de migrantes, está conformada por Turquí­a, luego Grecia o España, y, por último, Guatemala o México, todo ello con tal de llegar a Estados Unidos, lo que vendrí­a a sumarse a otro de los ilí­citos.

Propuesta

Las organizaciones sociales intentan impulsar que se apruebe la iniciativa de la CICIG, pues ésta ayudarí­a a iniciar las investigaciones que los entes investigativos de Guatemala no han podido realizar.

Para Claudia Samayoa, esta propuesta debe estar encaminada a promover el respeto a los derechos humanos. «En todos los ilí­citos, está involucrado una larga serie de violaciones a los derechos humanos», indicó.

De acuerdo con la propuesta presentada ayer, la CICIG deberí­a actuar en conjunto con el Ministerio Público, que no ha podido «o querido» investigar la delincuencia organizada, pues en sus estructuras internas está impregnada por los grupos paralelos.

Asimismo, se ayudarí­a al Organismo Judicial ha «independizarse» del crimen organizado, pues también ha corrompido a esta institución.

Por su parte, Samayoa señaló que si hay partidos que han votado en contra de la CICIG, es porque obviamente tienen ví­nculos con el crimen organizado, y no sólo es para proteger a personajes que cometieron crí­menes de guerra en el pasado.