El huracán Dora se debilitó ayer a la categoría 1 en el Pacífico mexicano, pero todavía está cerca de zonas costeras que se mantienen en alerta.
Sus vientos perdieron fuerza hasta llegar a 150 kilómetros por hora (90 millas) el viernes temprano. Está en vigor una alerta de tormenta tropical para la península de Baja California Sur, incluyendo el centro turístico de Los Cabos.
Dora sigue alejándose gradualmente de la costa, pero las olas que genera golpearon comunidades costeras. Los cimientos de un pequeño faro a 60 kilómetros (35 millas) al este del puerto turístico de Acapulco se vinieron abajo el miércoles.
Además, aproximadamente 60 restaurantes con techos de palma alrededor de las playas de Las Peñitas y La Bocana fueron arrancados o dañados por la tormenta.
El Centro Nacional de Huracanes en Miami informó que el ojo del huracán se encuentra a 415 kilómetros (255 millas) al sur de Cabo Corrientes, en el estado de Jalisco, en la zona occidental de México.