La Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) informó ayer que rebajará unos casi 1,4 millones de dólares a los salarios de los trabajadores que participan en una huelga de clínicas y hospitales en todo el país.
La huelga nacional de trabajadores del Seguro Social cumplió tres días sin que se hayan entablado negociaciones entre sindicatos y la directiva de la CCSS.
Los sindicatos rechazaron la medida y llamaron nuevamente a una huelga nacional. En la jornada cerca de 6.000 personas manifestaron por el centro de la capital para exigir la renuncia de la presidenta ejecutiva de la Caja, Ileana Balmaceda, informaron los organizadores.
«El movimiento continúa» afirmó el líder sindical Luis Chavarría, «recordemos que esto es una huelga indefinida y ésta (marcha es) una primera de muchas que estaremos haciendo en San José» sentenció.
En declaraciones al canal 6, Ubaldo Carillo, gerente de Logística de la CCSS, señaló que si bien aumentó la participación de funcionarios en el paro, «estamos hablando de 46.000 trabajadores que están laborando y solo 4.000 (que) hicieron caso a los sindicalistas».
La huelga fue desencadenda por la decisión de la CCSS de reducir a un 60% el pago de salarios a los empleados de la institución que sufren de una incapacidad médica, prestación por la que antes percibían el 100% de su sueldo. La medida, ordenada por la Procuraduría bajo el argumento que así se iguala a las condiciones del resto de trabajadores estatales, se adoptó para recortar el déficit que agobia a la entidad y que este año se estima alcanzará 184 millones de dólares.
El Ministerio de Salud ordenó la suspensión de la huelga y giró una orden sanitaria que de incumplirse podría generar denuncias penales contra los participantes en el movimiento.
La presidente Laura Chinchilla ofreció desembolsar por adelantado 170 millones de dólares, correspondientes a los pagos que el gobierno debe hacer a la Caja durante los próximos tres años, para atajar el déficit en las cuentas.
Los huelguistas expresan que la crisis financiera es resultado de una gigantesca deuda que el gobierno y muchos patronos morosos tienen con la institución, fundada en 1941 y emblemática del estado benefactor costarricense.
El anterior jefe del seguro social, Eduardo Doryan, renunció el miércoles a su actual puesto en otra entidad gubernamental para defenderse de los señalamientos que lo hacen corresponsable de la actual crisis deficitaria.
La CCSS es la única entidad pública que presta servicios de salud a la población. La huelga no debería afectar los servicios de urgencias.