Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes) está a 56 vueltas de un título mundial histórico en Fórmula 1, que puede lograr el domingo en Shanghai (China), si su compañero Fernando Alonso y Kimi Rí¤ikkí¶nen (Ferrari) no logran recortarle dos y ocho puntos, respectivamente.
Tras la eliminación en la carrera al título de Felipe Massa (Ferrari) en Japón, el pasado domingo, Hamilton, primer piloto en superar la barrera de los 100 puntos en 15 grandes premios (107), es el único que puede asegurarse la corona antes de la última carrera, en Brasil, gracias a los doce puntos de ventaja sobre Alonso y 17 sobre Kimi Rí¤ikkí¶nen (Ferrari).
A sus 22 años, el primer piloto negro de la Fórmula 1 puede convertirse en el más joven campeón de este deporte. Un récord que quitaría a Alonso al mismo tiempo que su corona.
Sus planes podrían verse sin embargo comprometidos debido a una investigación por parte de la FIA sobre su comportamiento cuando entró el coche de seguridad en la última carrera de Japón, que podría haber causado el choque y abandono de Mark Webber (Red Bull-Renault) y Sebastian Vettel (Toro Rosso-Ferrari).
El británico podría ser penalizado por ello en la parrilla de salida de Shanghai.
«Todo es todavía posible, pero estoy confiado y extremadamente determinado», afirma Hamilton. «Se habla mucho del título, pero intento quitarme esa idea de la cabeza y concentrarme en cada una de las dos carreras para obtener el mejor resultado posible».
Mientras que Alonso -que se proclamó campeón en 2005 y 2006 en Brasil- y Rí¤ikkí¶nen conocen bien los dos últimos circuitos de la temporada, Hamilton los descubre.
Pero en los cuatro circuitos que descubrió esta temporada, el piloto británico se impuso en tres ocasiones (Canadá, Estados Unidos, Japón) y terminó tercero en el otro (Australia).
Alonso y Raikkonen tendrán menos presión, ya que necesitan una hazaña para quitar el título a Hamilton.
«Igual que a Kimi (Rí¤ikkí¶nen), me queda una pequeña posibilidad. Ya no tenemos el futuro en nuestras manos», explica el español. «Sólo debemos hacerlo lo mejor posible» y esperar un error de Hamilton.
«Todavía creo que es posible. Todo puede pasar en Fórmula 1. A veces se escucha que es un deporte aburrido, donde no pasa nada, pero por otro lado también es un deporte imprevisible, sobre todo cuando llueve. Mientras matemáticamente no se haya escapado, hay que creer en el triunfo», añadió Alonso.
El español no esconde sus ganas de que esta temporada termine, que ha estado marcada por el asunto de espionaje a Ferrari y que terminó con la exclusión de McLaren-Mercedes del campeonato de constructores.
Un año marcado también por el deterioro de sus relaciones con su nuevo equipo McLaren-Mercedes, su patrón Ron Dennis y su compañero Hamilton.
«Sí, tengo ganas de que llegue el lunes posterior al Gran Premio de Brasil. No hay ninguna duda», afirma el español, rechazando hablar de su futuro.
Raikkonen, que afirma no lamentar su traspaso a Ferrari, cuando será un piloto de su antigua escudería que aparentemente se llevará el título, confirmó que hará «todo lo posible para ganar las dos últimas carreras», aunque se hace eco de las declaraciones de Alonso: su eventual victoria final «no depende de nosotros (Ferrari)».
Los deseos de lluvia de Alonso y Rí¤ikkí¶nen podrían cumplirse el domingo, ya que las previsiones meteorológicas anuncian un riesgo importante de precipitaciones.