El presidente estadounidense, George W. Bush, le pidió a su homólogo chino, Hu Jintao, que dejara flotar su moneda, el yuan, en una reunión en Sidney en que discutieron también sobre un referendo que pretende llegar a cabo Taiwán.
Bush presionó a Hu para que dé «continuos pasos» hacia la flotación del yuan, una medida que reduciría el gigantesco déficit comercial estadounidense con China, según dijo un importante colaborador del presidente norteamericano.
«El presidente Hu indicó que China continuaría reformando el sistema cambiario y dejaría que el mercado jugara un rol más activo», señaló Dan Price, consejero de la Casa Blanca.
«Las dos partes acordaron que la sola reforma del sistema cambiario no resolverá nuestros problemas de comercio. Pero el presidente Bush enfatizó la importancia de que China dé continuos pasos en el tema cambiario», dijo Price a la prensa.
Los dos mandatarios, reunidos en Sidney en la antesala de la Cumbre del Foro Económico Asia-Pacífico (APEC), también trataron el tema del referendo que quiere organizar Taiwán en busca de su ingreso a las Naciones Unidas, iniciativa que ya Washington condenó en el pasado.
El presidente chino, Hu Jintao, dejó claro que la ONU debe liderar la estrategia para enfrentar el calentamiento global, una idea que choca con la iniciativa de Estados Unidos -apoyado por Australia- que prefiere llegar a un tipo de negociación que no tenga nada que ver con el actual protocolo de Kyoto.
El primer ministro australiano John Howard puso el cambio climático en la agenda de la cumbre del Foro Económico Asia-Pacífico (APEC) que se realizará el fin de semana en Sidney, y la controversia no tardó en producirse.
El presidente chino, Hu Jintao, dijo que si bien veía con complacencia que el tema del calentamiento global fuera tratado en la APEC, el foco del problema debía ser tratado en las Naciones Unidas.
En una conferencia de prensa conjunta con Howard, Hu dijo que cualquier declaración que la APEC haga sobre el tema climático debe dejar en claro que una convención de las Naciones Unidas sobre calentamiento global «debe permanecer como el principal canal para el esfuerzo internacional de detener el cambio climático».