China y Japón reanudan diálogo de defensa


Reunión. El ministro de defensa chino, Cao Gang Chuan (C), acompaña a su par japonés, Masahiko Komura, en Tokio.

Japón y China acordaron este jueves reanudar su diálogo militar y establecer un «teléfono rojo» entre ambos paí­ses, a pesar de que constataron algunas diferencias, entre ellas el tema de Taiwán.


El acuerdo fue oficializado durante la visita que actualmente realiza a Japón Cao Gangchuan, el titular de Defensa chino, el primer responsable de esta cartera del régimen de Pekí­n que visita suelo nipón desde hace nueve años.

Cao se reunió con el primer ministro japonés, Shinzo Abe, y con su homólogo Masahiko Komura.

«Invitando al jefe de la defensa china, esperamos contribuir a la mejora de la relaciones bilaterales», declaró Komura, quien se hizo cargo de la cartera japonesa de Defensa el lunes, tras el reajuste gubernamental llevado a cabo por Abe.

Ambos ministros acordaron crear un grupo de trabajo para establecer, «en cuanto sea posible», un «teléfono rojo» reservado a cuestiones militares entre Tokio y Pekí­n, declaró un portavoz del ministerio japonés de Defensa.

No obstante, como su fiel aliado Estados Unidos, Japón manifestó su preocupación por el aumento del presupuesto militar chino.

Komura pidió transparencia en este asunto. «China debe aclarar las razones que justifican el rápido aumento de sus gastos militares y precisar sus objetivos», dijo, citado por su portavoz.

Según Cao, ese crecimiento sigue la tendencia mundial y está destinado mayoritariamente a sufragar los sueldos de las tropas.

El refuerzo militar de China también tiene como objetivo defender los intereses nacionales, según el ministro, que aludió a las eventuales «medidas severas» que puede tomar Pekí­n para resolver el diferendo con Taiwán.

China considera la isla como propia, a pesar de su separación, de facto, desde 1949.

En enero de 2005, Tokio se alineó con Estados Unidos y consideró que China representa una amenaza militar para Taiwán, lo que molestó especialmente en Pekí­n.

A pesar de constatar esas diferencias, los responsables chino y japonés calificaron su reunión de «amistosa» y «extremadamente productiva».

Cao devolvió la invitación a su homólogo japonés para visitar China el año que viene.

Las relaciones bilaterales entre China y Japón mejoraron desde la llegada al poder de Abe en septiembre de 2006, tras un perí­odo de crisis durante el mandato de su predecesor, el también conservador Junichiro Koizumi (2001-2006).

Al igual que la mayorí­a de los paí­ses asiáticos, China protestó abiertamente por las reiteradas visitas que Koizumi llevó a cabo a un santuario nacionalista nipón dedicado a los caí­dos en la Segunda Guerra Mundial y donde también están enterrados criminales de guerra.