Firmas extranjeras compran sí­mbolo británico


Negocio. El jefe del grupo Akzo Nobel, Hans Wijers, al anunciar la compra de la británica ICI.

El grupo de pinturas ICI, ex imperio quí­mico británico que será comprado en 12.000 millones de euros por el sueco-holandés Akzo Nobel, es uno de los últimos sí­mbolos de la economí­a que cae en manos extranjeras, una práctica que el gobierno laborista nunca impidió.


Imperial Chemical Industries, conglomerado creado en 1926, inventó el polietileno, los medicamentos betabloqueantes y una buena parte de los componentes de la bomba atómica. Llegó a emplear hasta 130.000 personas en el mundo, contra 26.000 actualmente.

ICI era demasiado grande, y anunció sus primeras pérdidas en 1980. En 1991, temeroso de ser englutido por el grupo rival Hanson, decidió restringir sus áreas de actividad.

ICI vendió una mirí­ada de actividades, entre ellas su rama de medicamentos Zeneca, convertido en AstraZeneca, uno de los primeros grupos farmacéuticos europeos tras su alianza con el sueco Astra AB. Este año, vendió su división de perfumes y de aromas Quest al suizo Givaudan.

Akzo sólo guardará las pinturas (sobre todo Dulux Valentine) y venderá National Starch (adhesivos y componentes electrónicos) al alemán Bayer.

La compra de ICI por parte de un grupo extranjero se agrega a una gran lista que sorprenderí­a en Francia o Alemania, donde los gobiernos vigilan de cerca estas adquisiciones.

Desde 2005 en Reino Unido, los españoles compraron el banco Abbey (Santander), el distribuidor de energí­a Scottish Power (Iberdrola), el operador de telefoní­a móvil 02 (Telefónica) e incluso BAA, propietaria del aeropuerto de Heathrow (Ferrovial). Un Indio, Tata Steel, compró la siderúrgica Corus, ex British Steel.

Los franceses compraron al gigante del alcohol Allied Domecq (Pernod Ricard), al fabricante de yeso BPB (Saint-Gobain) y las tiendas Body Shop (L’Oréal). Los alemanes adquirieron al productor de gas industrial BOC (Linde), la cementera Hanson (HeidelbergCement) y la compañí­a de agua Thames Water (RWE), vendida luego al australiano Macquarie.

El gobierno británico siempre quedó impasible, incluso cuando un fondo de Dubai compro los puertos y ferries P