Representantes del Sindicato de la Construcción y Servicios (SINCS – G), de las Cámaras de Industria y la Construcción y del Ministerio de Trabajo de Quetzaltenango, firmaron un convenio de colaboración que permite el trabajo decente y la generación de un espacio de diálogo social entre los actores de las relaciones de trabajo.
QUETZALTENANGO / Agencia CERIGUA
Julio Díaz, secretario general del SINCS – G, dijo que el trabajo decente como lo plantea la Organización Internacional del Trabajo, ha sido asumido como una bandera del movimiento sindical internacional y que esa gestión involucra a los actores de la relación tripartita, en este caso, empleadores, gobierno y organizaciones sindicales.
Díaz añadió que además se pretende sentar las bases para la construcción de una agenda para descentralizar recursos y que el empresario y el trabajador quetzalteco tengan la oportunidad de realizar las obras y no como ha sucedido en el pasado, cuando por cuestiones de compadrazgos o politiquerías no ha sido así.
A decir de Julio Betancourth, de la Cámara de la Construcción, la firma del convenio de buena voluntad permite la unión de criterios entre las necesidades del sector laboral y productivo, con el aval del Gobierno, lo que representa mejoras para los trabajadores con el propósito de alcanzar un nivel de vida adecuado.
Por su parte Pablo López, delegado del Ministerio de Trabajo, resaltó la importancia de la firma del convenio, pues de esa forma se propicia una buena relación laboral, ya que se alcanza el desarrollo mutuo, tanto para los empleadores como los laborantes, lo que impide que se den presiones por ambos lados.
Ernesto Marval, de la Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera, quien estuvo presente en la firma del convenio, manifestó que esa organización está integrada por 63 sindicatos en América Latina y el Caribe, con una militancia activa de dos millones de trabajadores y trabajadoras.