Nuevo fósil desafí­a teorí­a de la evolución


Arqueólogos han descubierto la antigua mandí­bula de lo que serí­a una nueva especie de simio muy cercana al último ancestro común de gorilas.

Arqueólogos han descubierto la antigua mandí­bula de lo que serí­a una nueva especie de simio muy cercana al último ancestro común de gorilas, chimpancés y humanos, reveló un estudio divulgado el lunes.


El fósil, de 10 millones de años de antigí¼edad y completo, con 11 dientes, fue recuperado en 2005 en depósitos de barro volcánico en la región Nakali en Kenia, en el borde oriental del Valle Rift, por un equipo de investigadores japoneses y kenianos.

Los investigadores afirman que el fósil llena lo que hasta hace poco era una especie de vací­o en el registro de fósiles, y desafí­a una de las suposiciones vigentes sobre la evolución de los primates.

Estudios genéticos sugieren que los humanos y los grandes simios evolucionaron por separado a partir de un ancestro común, hace unos ocho millones de años, pero los paleontólogos han luchado por encontrar fósiles de los ancestros de los grandes simios del Africa moderna de los últimos 13 millones de años.

Sin embargo, cientí­ficos han encontrado mucha evidencia de fósiles de grandes simios en Europa y Asia en ese periodo, y también observaron algunas similitudes entre algunos de esos simios y los simios africanos contemporáneos.

Eso llevó a algunos paleontólogos a especular con que el ancestro común de simios y humanos habí­a abandonado Africa y evolucionado en varias especies diferentes, y que una de esas especies volvió luego al continente para convertirse en el eslabón faltante entre el hombre y sus parientes primates más cercanos.

Pero esta nueva evidencia parece debilitar esa teorí­a, y no es la única.

Además de esta nueva especie keniana de simio antiguo (apodado Nakalipithecus nakayamai), recientemente surgió evidencia de otro antiguo simio africano.

En agosto, un equipo de paleontólogos japoneses y etí­opes anunció que habí­a descubierto en 2006 y 2007 fósiles de dientes de 10 millones de años de antigí¼edad, en la región Afar de Etiopí­a. Los cientí­ficos indicaron que los dientes probablemente pertenecí­an a una especie «proto-gorila», que bautizaron Chororapithecus abyssinicus.

Antes de esto, la última vez que un fósil homí­nido de este periodo fue encontrado en Africa fue en Kenia, en 1982.

La evidencia de que Africa fue el hogar de varios ancestros de los simios en la mitad y el final del periodo mioceno arroja dudas sobre la teorí­a de que los ancestros de los simios africanos contemporáneos se extinguieron completamente en el continente y fueron luego reintroducidos desde Europa o Asia, indican los autores en las Actas (Proceedings) de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.

Y aunque serán necesarios más hallazgos de fósiles para desarrollar el árbol genealógico de los simios africanos modernos, «es probable que estos homí­nidos africanos del periodo mioceno tardí­o sean más o menos cercanos al último ancestro común de los grandes simios africanos y los humanos», concluyeron los autores.