Lucy Barrios.
Dos guatemalas: una rural que pide mayor empleo, mejores condiciones de desarrollo y salir de la pobreza y otra urbana que busca primordialmente se le garantice la seguridad ciudadana, es el reflejo de los resultados de las elecciones presidenciales de segunda vuelta.
Al analizar el comportamiento del electorado que en 20 de los 22 departamentos favoreció con su voto la propuesta de la Unidad Nacional de la Esperanza, el doctor Jorge Mario García Laguardia, ex Procurador de los Derechos Humanos, asegura que el gran reto del Presidente electo, ílvaro Colom, es responderle a las grandes mayorías que lo eligieron; mientras que el dinero y el sector empresarial deben entender que su vinculación con la política le está haciendo daño al sistema democrático.
¿Qué opinión le merece el comportamiento del electorado en estas elecciones?
Cuando se produjo la segunda vuelta se aclararon bien las dos opciones políticas: una de centro izquierda, socialdemócrata; y, la otra de extrema derecha, militar, empresarial. En la segunda vuelta se da la decisión política propiamente dicha, se produce con una diferencia muy pequeña, eso implica un país dividido como sucede en muchos de los países de América Latina.
¿Por qué cree que se dio ese comportamiento?
Esto se produce por la mezcla absolutamente indeseable entre el dinero y la política que ha hecho que los grandes intereses económicos -legales e ilegales- tengan mucha influencia en el proceso político y en las elecciones, particularmente en la capital. Por supuesto, siempre ha habido dos guatemalas: la de la zona urbana y la rural.
¿Para los capitalinos es más importante la seguridad que el empleo?
La seguridad es una preocupación de todos pero no es la única preocupación. Para los habitantes del interior del país es mucho más importante el trabajo, la igualdad, los derechos de los pobres y eso es lo que se ve en esta elección.
Si hay una expresión del interior del país, ¿las nuevas autoridades deberían leer esa situación?
Hay una expresión del interior que no coincide con la capital, eso esta claro. Los sectores empresariales y el dinero influyen más, a través de todos los medios de comunicación y todos los elementos que tienen, en las áreas urbanas, especialmente en la capital, que en las zonas rurales.
Usted hablaba de grandes intereses económicos involucrados en la política, ¿ello es dañino para la democracia?
En un seminario de Transparencia Internacional mi tesis se llamaba «Dinero y política, la cuadratura del círculo de la democracia en América Latina». Creo que la vinculación del dinero en la política y de los empresarios y la política está alterando todo el sistema democrático en América Latina, no solo en Guatemala. El fenómeno ya se vivió en Argentina, Venezuela, Ecuador, México y recientemente en Honduras, con las características de cada país.
En esas condiciones, ¿ílvaro Colom está frente a un gran reto?
La elección es un reto para las autoridades electas. El planteamiento de las zonas rurales del país implica ciertas reformas a su favor, no solo decisiones a favor de una pequeña minoría privilegiada, es una llamada de atención a cualquier gobierno que sea electo en esas condiciones.
Pero ¿cómo atender esas necesidades si no hay suficientes recursos financieros?
Yo creo que tienen recursos. Lo que pasa es que se han limitado a una pequeña minoría privilegiadísima. La minoría más privilegiada de América Latina es la oligarquía de éste país. El reto de ílvaro Colom y de cualquier Presidente es responder a las demandas de la población, responder a las demandas de la mayoría de la población y no de una minoría.
«El reto de ílvaro Colom y de cualquier Presidente es responder a las demandas de la mayoría de la población y no de una minoría»
Jorge Mario García Laguardia
Ex Procurador de los Derechos Humanos.