Irregularidades no invalidan las elecciones


Por primera vez, la USAC con el apoyo de la PDH y el Arzobispado supervisaran el proceso electoral.

Allan Martí­nez

Más de ocho mil personas, entre voluntarios, profesionales, docentes y trabajadores de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac) conjuntamente con personal de la Procuradurí­a de los Derechos Humanos (PDH) y del Arzobispado Metropolitano de Guatemala, participaron como observadores de las elecciones generales celebradas el pasado 9 de septiembre.


Con ello culminó el involucramiento llevado a cabo por las tres instituciones, a partir de la convocatoria oficial a los comicios, en abril, destinado a motivar la participación ciudadana en un evento tan crucial como lo es la elección de las nuevas autoridades ejecutivas, legislativas y municipales, que dirigirán los destinos de la nación durante los próximos cuatro años.

A lo largo de 14 horas, los observadores detectaron irregularidades, tales como la tardanza en la apertura de algunos centros de votación, contratiempos para la acreditación de fiscales de partidos y errores en los listados que vedaron el derecho del voto a varios ciudadanos. Además, se comprobó que algunas unidades del transporte urbano cobraron el servicio cuando se habí­a anunciado que era gratuito y se detectaron casos de «acarreo» de votantes a cuenta de los partidos en contienda.

Todo esto no llega a invalidar el acto cí­vico-polí­tico del 9 de septiembre, a pesar que en algunos casos se trata de situaciones graves ocurridas hacia el final de la jornada en distintos lugares del territorio nacional. Debe insistirse, sin embargo, que se trataron de hechos aislados y no pueden generalizarse como la constante en un proceso electoral calificado de «ordenado» por los observadores internacionales.

En opinión del Rector de la USAC, Estuardo Gálvez, era imprescindible que el proceso electoral tuviera la credibilidad, la confianza y la participación de la población. Por ello, la Universidad, la PDH y el Arzobispado ven con satisfacción que las elecciones se desarrollaron, en términos globales, en un marco de participación ciudadana. La apuesta por el fortalecimiento de la institucionalidad del paí­s se manifiesta a través de la consolidación de la democracia electoral y el avance a la democracia participativa.

En breve, la Universidad de San Carlos de Guatemala, la Procuradurí­a de los Derechos Humanos y el Arzobispado Metropolitano de Guatemala emitirán un comunicado conjunto donde presentarán sus conclusiones.