Bajas previsiones de crecimiento


La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) bajó sus previsiones de crecimiento para Francia y Alemania este año, de 2,2% al 1,8% y del 2,9% al 2,6% respectivamente, anunció hoy su economista jefe, Jean-Philippe Cotis, en conferencia de prensa.


Francia registra la mayor revisión a la baja del conjunto de los paí­ses del Grupo de los Siete (G7). Para el conjunto de la zona euro, la revisión de la previsión de crecimiento es menor, y pasa de 2,7% a 2,6%.

Las previsiones para Estados Unidos también fueron reducidas. La OCDE anticipa ahora un crecimiento de 1,9% este año, contra el 2,1% precedente, anunciado en mayo.

Por el contrario, las previsiones de crecimiento del Reino Unido fueron aumentadas de 2,7% a 3,1% y las de Canadá de 2,5% a 2,7%, y fueron mantenidas para Japón, en 2,4%.

«Estas revisiones se vieron ampliamente influenciadas por lo que pasó en el segundo trimestre y por las cifras de Eurostat muy inferiores» a las previsiones difundidas en mayo por la OCDE, indicó a la AFP Vincent Koen, consejero económico de la Organización.

El impacto de la crisis de los préstamos hipotecarios de riesgo en Estados Unidos («subprime»), que hundió a los mercados financieros en el mes de agosto, no está incluido en estas previsiones y podrí­a implicar nuevas revisiones a la baja.

«Las perspectivas de crecimiento son ahora bastante menos buenas y más inciertas» que antes de la crisis del sector «subprime» y «los riesgos bajistas (sobre el crecimiento) son más evidentes», señaló el texto del discurso preparado por Cotis.

«Las condiciones del mercado son ahora bastante más tensas», agregó.

Sobre todo en Estados Unidos, «el sector inmobiliario deberí­a pesar con más fuerza y más tiempo de lo previsto» sobre la economí­a, y el crecimiento «caerí­a muy por debajo de su potencial durante el segundo semestre, tras un claro rebote en el segundo trimestre», estimó Cotis.

En la zona euro, «el nivel máximo de crecimiento ya pasó», sostuvo.

Del lado de los bancos centrales, la OCDE estimó que la Reserva Federal estadounidense (Fed) «podrí­a tener razones para bajar sus tasas directrices», mientras pidió al Banco Central Europeo (BCE) «esperar y ver» la evolución de los mercados financieros antes de tomar una decisión sobre una eventual alza de su tasa directriz.

El «consejo» de la OCDE al BCE, que el jueves celebra su reunión de polí­tica monetaria en Francfort (Alemania), «es más bien de esperar y ver» la evolución de los mercados financieros tras la crisis «subprime», declaró Cotis.

No obstante, precisó que «las presiones inflacionistas subyacentes» en la zona euro, debidas parcialmente a la mejora del mercado de trabajo, «parecen justificar una continuación del ajuste monetario una vez que se estabilice la situación en los mercados financieros».