La pelea por el hueso está cada día más encarnizada; pese a que se firmó un convenio de no agresión por parte de los diferentes participantes en la carrera por lograr un lugar en el Gobierno.
La forma en que lo consigan, por lo visto, no les importa, pues ya sea por las buenas o por las malas, ellos quieren lograrlo, no importando a quién se lleven entre los pies.
Fredy Padilla / A -1 658223
Mienten, roban, matan, y lo peor de todo es que la gente que los sigue o apoya se viene a convertir en lo mismo, por qué, porque tienen que hacer lo que los aspirantes de los partidos políticos les dicen que hagan o no habrá lugar para ellos dentro de sus planes.
Tenemos, por ejemplo, a doña Sandra Torres, a quien le fue negado el derecho a participar por las razones ya conocidas, no sólo por ella, sino por todos los que saben de leyes, que por la forma de querer hacer las cosas que están fuera del contexto legal, no puede participar; pero ella expresa (no ella sino los ‘‘asesores†que tiene y aconsejan a la gente para que lo digan en su publicidad) un anuncio que dice así: ‘‘Queremos que doña Sandra participe, pues ella ha ayudado a muchas personas en la extrema pobreza; ella tiene derecho a participar, pero es pura política y por eso no la dejan.’’
Es cierto, ella tiene derecho a participar, siempre y cuando esté dentro de los parámetros que dicta la ley; sin embargo, y ella lo sabe, desde el principio quiso burlarse de la ley al divorciarse. ¿Qué?, ¿acaso sus asesores no le hicieron ver el error que estaba cometiendo al hacer tal cosa? Es ahí donde se ve que no tienen ni la más mínima cultura, educación ni ética profesional. Así que, señora Torres, tendrá que esperar cuatro años para poder participar en las contiendas electorales, y sí con todas las de la ley y nada ni nadie tendrá que decirle no, como en este momento le está pasando; ya deje ese berrinche de niña rica que todo lo quiere y tiene que tenerlo a puro tubo, no, gáneselo a pulso y en buena fe.
Ahora viene Harold Caballeros, quien también, como que no leyera la Constitución Política de Guatemala, está igual que doña Sandra que quiere más dinero y poder; lea el artículo 186, párrafo ‘‘F’’, que dice Prohibición Para optar al cargo de Presidente o Vicepresidente de la República: Los ministros de cualquier religión o culto. Yo veo y leo que está tan claro como el agua, no me venga con que no lo sabía o que en la Constitución hay errores, porque los de los errores son ustedes, que quieren llegar al poder a como sea posible.
Todos queremos una Guatemala unida, sin ladronismo, asesinatos, secuestros, una Guatemala en paz, sin mentirosos en el Gobierno (que eso es imposible), sin violencia y que podamos salir a las calles sin la preocupación y el miedo de que algo malo nos va a pasar.
Quisiera creer que esta vez se van a hacer realidad todos los deseos de los guatemaltecos, que es tener un presidente de verdad, un hombre que se faje bien los pantalones y que no sea mangoneado por la mujer, como sucedió en este gobierno; queremos gente capaz, que sea honesta, digna y que se deje de tanta paja y haga lo que tiene que hacer.