Varios incidentes en distintas ciudades de Argentina ensombrecieron hoy los festejos de miles de hinchas que salieron a las calles para celebrar el subcampeonato que logró la selección albiceleste en el Mundial de fútbol de Brasil.
En Buenos Aires, grupos de aficionados se enfrentaron a golpes entorno al Obelisco porteño y se arrojaron piedras mientras una multitud festejaba la actuación del equipo pese a la derrota sufrida por 1-0 ante Alemania en la final.
Decenas de policías debieron actuar para poner fin a los disturbios, dispararon balas de goma, gases lacrimógenos y arrojaron agua desde camiones hidrantes.
En cuestión de minutos, el lugar, que estaba preparado para la fiesta, terminó en una situación de caos, con miles de ciudadanos escapando de los incidentes y de la reacción policial.
Al menos 20 personas sufrieron heridas de diferente gravedad a raíz de los incidentes y otras 40 fueron detenidas por la policía. Las ambulancias, en tanto, no pudieron acercarse a la zona para auxiliar a los lesionados debido a la gravedad de los enfrentamientos.
Los disturbios ocurridos en el centro de Buenos Aires se extendieron por más de dos horas. Los simpatizantes violentos, además, provocaron destrozos y saqueos en comercios cercanos al Obelisco y en salas de teatro ubicadas sobre la tradicional avenida Corrientes.
También en las ciudades de La Plata, Córdoba y Mar del Plata la celebración terminó en incidentes y con personas detenidas por la policía.