Argentina buscará el domingo el tricampeonato ante Alemania en la final del Mundial de Brasil 2014 en el Maracaná tras vencer hoy por penales 4-2 a Holanda, gracias a dos grandes atajadas de Sergio Romero, luego de empatar sin goles en el estadio Arena Corinthians de Sao Paulo.
Sao Paulo / dpa
Reeditarán la final de Italia 90, la última vez que Argentina llegó a una final luego de ganar las Copas del Mundo en 1978 y 1986. Alemania, que clasificó tras eliminar al anfitrión por un humillante 7-1, cayó en tanto en Corea del Sur y Japón 2002 ante Brasil.
Holanda fracasó hoy en su intento de alcanzar una nueva final para tomar revancha de su derrota ante España en Sudáfrica 2010 y las otras dos que sufrió en 1974 y 1978.
La emocionante definición por penales llegó luego de un encuentro que Argentina y Holanda jugaron con estrategia y que fue parejo, con pocos disparos a los tres palos, mucha marca y fricción bajo una intensa lluvia en Sao Paulo.
El potente trío «oranje» de Wesley Sneijder, Robin van Persie y Arjen Robben no pudo hacer diferencia ante un conjunto albiceleste compacto y efectivo, que supo defender y quebrar las líneas medias para llegar al arco holandés.
Con Messi controlado con marca triple, el equipo dirigido por Alejandro Sabella encontró el camino para entrarle a Holanda por la derecha, con una buena actuación de Lucas Biglia y Enzo Pérez en el mediocampo y con arranques de Ezequiel Lavezzi que dejaron sin reacción a los «oranjes».
Messi fue indispensable a la hora de desequilibrar, recuperar pelotas, sortear rivales, asistir y amenazar a Holanda, pero le costó encontrar el resquicio y fue perdiendo efectividad con el paso de los minutos. El portero Jasper Cillessen se ocupó además de frustrar sus tiros libres, que en otros partidos habían sido letales.
Javier Mascherano, en tanto, volvió a ser el capitán sin cinta que ordenó y arengó al equipo, con una actuación determinante en todos los sectores del campo.
En un partido de ida y vuelta, el primer ataque claro de Holanda llegó a los 12 minutos con un centro de Robben que Sneijder remató pero salió desviado. Apenas dos minutos después, un avance del conjunto albiceleste fue frenado con una falta sobre Enzo Pérez muy cerca del área, pero el tiro libre de Messi terminó en manos de Cillessen. Luego, a los 24’, probó Ezequiel Garay con un cabezazo que se fue por encima del travesaño.
El arquero argentino volvió a mostrar solidez, cuando a los 32’ y en cuestión de pocos segundos despejó con los puños dos seguidas de Sneijder, primero un tiro libre y después un centro. También fue clave sobre el final de los 90 minutos.
En el complemento, los dos equipos buscaron salir de contragolpe. Una carrera de Robben fue frenada por la defensa argentina, mientras que Cillessen salió a cortar a Messi y Vlaar se ocupó de evitar un cabezazo de Higuaín al arco tras un desborde de Lavezzi.
A los 74’, Holanda estuvo cerca de abrir el marcador con una gran jugada combinada que Van Persie cerró con una chilena que salió desviada. Argentina reaccionó de inmediato de contragolpe pero Higuaín se perdió la oportunidad más clara con un disparo que estuvo muy cerca.
Mascherano salvó al equipo a los 90’ cuando logró cruzar el botín para desviar un remate de Robben que había quedado mano a mano con Romero. Los minutos adicionados se jugaron a puro vértigo por las constantes búsquedas de Holanda por romper el cero.
Sabella intentó revitalizar, aunque sin éxito, el ataque con los ingresos a los 81’ de los delanteros Sergio Agüero y Rodrigo Palacio por Higuaín y Pérez, y en tiempo suplementario el volante Maxi Rodríguez reemplazó a Lavezzi, para no despoblar el mediocampo.
El tiempo suplementario comenzó con un monólogo holandés, en el que un Robben imparable encontró espacios por dónde entrar para crear riesgos, hasta que volvió a despertar Argentina con un par de llegadas de Palacio y Agüero.
Argentina sumó así otra gran victoria sobre Holanda, tras la conquistada en la final del Mundial 78. Y Sabella pudo hoy saborear el triunfo luego de caer, cuando era ayudante de campo de Daniel Passarella, ante Holanda en los cuartos de final de Francia 1998.
La selección argentina quedó hoy a sólo un paso del sueño del tricampeonato. Quizás, la última gran chance de una generación dorada del fútbol argentino liderada por Messi, Agüero, Mascherano, Di María e Higuaín que para Rusia 2018 tendrán 30 o más años.