Scolari, Löw, Sabella y Van Gaal: cuatro formas de liderar


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La fuerte personalidad de Luiz Felipe Scolari, la teoría de Joachim Löw, el perfil bajo de Alejandro Sabella y la riqueza táctica de Louis van Gaal. Los técnicos de los cuatro semifinalistas del Mundial de Brasil aspiran a alcanzar el título de campeón con características diferentes, adaptados a lo que requieren sus jugadores.

Por Daniel García Marco
Río de Janeiro, BRASIL / AGENCIA dpa

No tienen quizás el atractivo de los entrenadores de moda como Josep Guardiola, Jose Mourinho, Diego Simeone o Jürgen Klopp, pero uno de los cuatro liderará al campeón del mundo. Así son los técnicos de Brasil, Alemania, Argentina y Holanda.

LUIZ FELIPE SCOLARI (BRASIL)

Es el único de los cuatro que ya sabe lo que es ganar la Copa del Mundo, y de triunfar el 13 de julio en casa, emularía a Vittorio Pozzo, que hizo campeón a Italia en 1934 y 1938. Llevó al pentacampeonato a Brasil en 2002 y fue llamado de urgencia para la «Misión Hexa» en casa, con el encargo de liderar una joven escuadra con menos talento que en otras ocasiones y soportar toda la presión. Con 65 años, es su carácter y su gestión de grupos más que su pizarra lo que lo convierte en un buen entrenador. «‘Felipao’, antes que nada, es un psicólogo, un motivador», dice el comentarista brasileño Juca Kfouri. «Nosotros lo vemos como a un padre. Trata muy bien a los jugadores, cuida a los jugadores», dijo el ex futbolista Denilson, miembro del equipo en Corea/Japón 2002.

JOACHIM LÖW (ALEMANIA)

Si Scolari puede ser hosco, reaccionario y políticamente incorrecto, Löw, su rival en la semifinal de mañana, es todo lo contrario. Amante de los detalles tácticos y profundo estudioso del juego, Löw estuvo primero detrás de Jürgen Klinsmann y ahora delante de la gran revolución de juego en la «Mannschaft», a la que le falta un título para confirmarse. Alemania juega desde hace años con amor por la pelota y con estrellas talentosas. «Este joven plantel aún no llegó a su cénit», señaló Löw en una entrevista con la agencia dpa. El técnico de 54 años prometió presentar un equipo «absolutamente competitivo» en Brasil y lo está cumpliendo apelando también a viejos valores alemanes como el juego áreo.

ALEJANDRO SABELLA (ARGENTINA)

Ya ha conseguido lo que ningún otro en Argentina los últimos 24 años: llegar a semifinales. Pero no es suficiente cuando se dirige al mejor jugador del mundo de los últimos cinco años, Lionel Messi, en su punto exacto de madurez. El desafío y las presiones son enormes para el porteño de 59 años, que hace apenas cinco años debutó como técnico de un equipo de primera. «Sabella es un buen tipo, inteligente, con un bagaje futbolístico superior al promedio. Extremadamente leal, perfil bajo, trabajador, motivador, un fanático futbolero», lo define Pablo Hacker, autor junto a Javier Saúl del libro «Pachorra, historias para conocer a Sabella». Para perfil alto ya está Messi. Tras la experiencia con Diego Maradona en Sudáfrica 2010, Argentina necesitaba otra cosa en el banquillo, un motivador que también convence con sus planteamientos tácticos.

LOUIS VAN GAAL (HOLANDA)

Su cáracter áspero lo hace antipático para el periodismo, que en ocasiones olvida sus logros en Holanda, España y Alemania. Tras caer a los infiernos de la élite de entrenadores con su salida de Barcelona y fracasar con Holanda en el Mundial de 2002, empezó de cero y a los 62 años volvieron los éxitos, la llamada de un grande como el Manchester United y la segunda oportunidad con la «oranje». Vituperado al principio por su esquema de cinco defensores, en Brasil ha demostrado una gran flexibilidad táctica y un acierto total en sus decisiones, como la de cambiar de portero antes de la tanda de penales ante Costa Rica. «Cuando llegamos aquí, la prensa holandesa decía que ni siquiera íbamos a pasar la primera fase», recordó, siempre beligerante. «Nuestra meta ha sido desde el principio ser campeones del mundo», afirma convencido de su joven equipo.