Las autoridades nigerianas no darán marcha atrás a su decisión de despedir a todo el directorio de la federación de futbol de ese país, una medida que va en contra de las directrices de la FIFA y podría provocar una suspensión internacional para los campeones de África.

Dirigentes gubernamentales y del futbol se reunieron el fin de semana y respaldaron el cese del presidente de la Federación Nigeriana de Futbol, Aminu Maigari, junto con todo su directorio.
En la reunión, que la FIFA dijo que no endosaría, también se decidió realizar nuevas elecciones. La federación quedó a cargo de un funcionario nombrado por el ministro de deportes.
La FIFA no permite que los gobiernos se inmiscuyan en los asuntos futbolísticos y le dio a Nigeria hasta mañana para devolver el cargo a Maigari, bajo amenaza de sancionarla. Eso casi seguramente incluiría prohibir que la selección nacional participe en torneos internacionales y pudiera dejar a astros como John Obi Mikel, Victor Moses y Ahmed Musa fuera de la Copa Africana del año próximo en Marruecos, donde Nigeria debe defender su título.
Maigari fue arrestado a su regreso de la Copa del Mundo y los delegados en la reunión responsabilizaron a Maigari por una disputa con los jugadores por el pago de bonificaciones.
Nigeria fue eliminada por Francia en la segunda ronda del campeonato, etapa a la que llegaba por primera vez desde 1998. Sin embargo, su logro fue empañado por la disputa sobre los pagos cuando los jugadores se rebelaron contra la federación tras no recibir el dinero prometido si llegaban a octavos de final en el Mundial.
Un comunicado de la reunión informó que la federación nigeriana no había logrado «resolver completa y firmemente problemas de finanzas con las Super Águilas antes del campeonato».
Los funcionarios indicaron que querían una investigación sobre las finanzas de la federación bajo Maigari.
La administración temporal de la federación informó ayer que la reunión en la que se respaldó el despido fue válida, en contraste con la posición de la FIFA, que dijo que el congreso carecía de autoridad.
«No olviden que por mucho que respetemos a la FIFA, no podemos ignorar nuestras propias leyes», agregó Obinna Ogba, un delegado ante el congreso.
Nigeria y Argelia avanzaron de sus grupos en la Copa del Mundo para darle a África dos equipos en octavos de final por primera vez. Sin embargo, la reputación del continente se vio perjudicada por disputas financieras en las selecciones de Nigeria, Camerún y Ghana.
Camerún y Ghana, que no consiguieron ganar un partido en Brasil, ordenaron investigaciones sobre los descalabros.
Nigeria fue suspendida temporalmente por la FIFA por interferencia gubernamental tras la Copa del Mundo 2010, cuando el presidente del país afirmó que iba a retirar al equipo de competencias internacionales hasta que mejorara.