Colombia buscará mañana hacer historia en Fortaleza en su quinta participación en un Mundial de fútbol. De la mano de su emergente estrella James Rodríguez, el equipo cafetero tratará de meterse en las semifinales de Brasil 2014 y al mismo tiempo destruir el sueño de los anfitriones de alzarse con el «hexacampeonato».
Fortaleza, Brasil / dpa
Para Colombia, el de mañana es el partido más importante de su historia, ya que la selección jamás había llegado a los cuartos en un Mundial, a lo que se suma la sensación de que esta vez, a diferencia de otros tiempos, el nivel de ambos equipos es similar.
«A medida que va pasando el campeonato y que hemos ido logrando conseguir los resultados hemos mejorado nuestro nivel. Esta selección creció mucho en la parte deportiva y mental. Se ha fortalecido día a día y es muy consciente de lo que se está jugando en este partido, que obviamente es muy difícil porque es contra la selección que para muchos es la favorita», resumió el defensa Carlos Valdés.
Para Brasil, en cambio, el choque de mañana supone una nueva oportunidad para que el seleccionador Luiz Felipe Scolari logre convencer a su afición, después de actuaciones apagadas que culminaron en la dramática batalla de octavos con Chile para arrancar en penales el pase a cuartos.
El juego mediocre presentado por los pentacampeones en lo que va del Mundial y la crisis de llanto que afectó a varios jugadores brasileños durante el partido con Chile son argumentos adicionales para alimentar las esperanzas de los colombianos, pese a que el último triunfo del equipo cafetero sobre Brasil ocurrió en el lejano año de 1991.
«Yo veo a un Brasil fantasma», dijo a dpa el ex futbolista colombiano Adolfo «El Tren» Valencia, al asegurar que el equipo dirigido por el argentino José Pekerman «tiene todas las posibilidades de ganarle a Brasil».
No obstante, los pupilos de Scolari aseguran que han superado la crisis de nervios del choque con Chile y que los tropiezos y las críticas tuvieron el efecto de fortalecer al equipo.
«Hemos enfrentado a la mejor selección que ha tenido Chile y ganamos. Cada uno de nosotros superó su dolor y su cansancio y todos corrieron hasta el final. La victoria aumentó nuestra confianza», aseveró el máximo astro de Brasil, el delantero Neymar, la estrella solitaria del desordenado equipo brasileño, quien librará un duelo personal con el artillero colombiano James Rodríguez.
Pese a la confianza, el jugador del Barcelona reconoció que las sorpresas que ocurrieron en lo que va del Mundial de Brasil dejan en claro que ya «no hay equipos débiles» ni tampoco favoritos, y pronosticó que el choque con Colombia tendrá tintes de «guerra», así como ocurrió el sábado con Chile.
«Chile y Colombia son parecidos, por su calidad en el manejo de la pelota y por la rapidez de sus jugadores de ataque. Es otra guerra a la que entraremos concentrados, para que nos vaya mucho mejor», expresó Neymar, quien aseguró que está totalmente recuperado de los golpes en el muslo izquierdo y en la rodilla derecha que sufrió en el choque de octavos.
Sin problemas de lesiones o suspensiones, Pekerman alineará probablemente al mismo equipo titular utilizado en los partidos anteriores, con David Ospina en el arco; Camilo Zúñiga, Cristian Zapata, Mario Yepes y Pablo Armero en la defensa; Carlos Sánchez, Abel Aguilar, Juan Guillermo Cuadrado y James Rodríguez en el mediocampo, y con Teófilo Gutiérrez y Jackson Martínez en el ataque.
Scolari, por su parte, tendrá que prescindir ante el ofensivo equipo cafetero de su «sheriff», el volante Luiz Gustavo, quien cumplirá suspensión por doble amarilla y será reemplazado por Paulinho. Salvo por ese cambio, «Felipao» tiende a mantener inalterable el equipo titular inicial, con Julio César en el arco; Dani Alves, Thiago Silva, David Luiz y Marcelo en la defensa; Paulinho, Fernandinho y Oscar en el medio campo y con Hulk, Neymar y Fred en el ataque.
No obstante, el entrenador brasileño dejó en claro que podrá dictar cambios en el equipo y en el mismo sistema de juego, si lo considera necesario para frenar el ímpetu ofensivo colombiano. En ese caso, Scolari sacaría de la cancha al delantero Fred y metería al zaguero Henrique, para restablecer el sistema 3-5-2 que utilizó con éxito en la campaña del pentacampeonato en Corea/Japón 2002.
El árbitro español Carlos Velasco fue designado por la FIFA para dirigir el partido, que se jugará a partir de las 14 horas en el estadio Castelao de Fortaleza.