La infanta Cristina, hermana del rey Felipe VI de España, fue procesada hoy por delito fiscal y blanqueo de capitales por el juez que investiga desde hace más de tres años el caso de corrupción que protagoniza su marido, Iñaki Urdangarin.
A punto de cumplirse mañana jueves una semana de la proclamación de Felipe VI, el juez José Castro de Palma de Mallorca decidió que su hermana debe sentarse en el banquillo de los acusados junto a su cuñado por el escándalo que hundió la imagen de la monarquía española y amargó los últimos años de reinado de Juan Carlos I.
Nunca antes en la historia de monarquía española un familiar directo del rey ha sido juzgado. La decisión del juez Castro en el auto con el que concluye la instrucción de caso supone el primer gran problema al que se enfrenta Felipe, de 46 años, en el inicio de su reinado.
La fiscalía, que se opuso desde el primer momento a la imputación de Cristina, de 49 años, y la abogacía del Estado recurrirán la decisión del juez, según se prevé en España.
La decisión final de enviar a la infanta al banquillo de los acusados estará por tanto en manos de un tribunal superior, la Audiencia Provincial de Palma. «Habrá que esperar a que se pronuncie la Audiencia de Palma», dijo en Madrid el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, en la primera valoración del gobierno.
El juez sostiene que la infanta se benefició de los negocios ilegales que su marido hizo presuntamente con administraciones públicas desde el Instituto Nóos, una organización que creó vinculada al mundo del deporte y en teoría sin ánimo de lucro.
Espere más información en nuestra edición vespertina