Con la venta de los Clippers de Los Ángeles por dos mil millones de dólares en la balanza, un juez sugirió el lunes que los términos de un fondo familiar son lo suficientemente claros como para inhabilitar a Donald Sterling como administrador y permitir que su ex esposa venda la franquicia sin su consentimiento.
LOS ÁNGELES / Agencia AP
En un momento dado, el juez del Tribunal Superior, Michael Levanas, dijo que el contrato del fondo de la familia Sterling es tan inequívoco que “podría decidir este caso en cinco minutos”.
En el centro de la publicitada batalla legal están los informes de tres médicos que examinaron a Sterling, de 80 años de edad, y encontraron que muestra síntomas avanzados de Alzheimer y demencia. Sus abogados argumentaron que debería ser autorizado a llamar a sus propios expertos en un juicio fijado para el 7 de julio.
El juez dijo que el acuerdo establece que si dos médicos examinaron Sterling y encontraron que carecía de la capacidad de administrar sus propios asuntos, se le inhabilitaría como administrador. No hay ninguna disposición para impugnar la decisión, dijo.
“No entiendo por qué quieren que el tribunal se involucre”, les dijo a abogados.
Finalmente, Levanas acordó permitir que los abogados presenten argumentos escritos y programó una audiencia para el 30 de junio, previa al juicio.
La esposa de Sterling, Shelly, está tratando de vender el equipo al ex ejecutivo de Microsoft, Steve Ballmer, cuya oferta expirará el 15 de septiembre. Los propietarios de la NBA votarán sobre el acuerdo el 15 de julio.
Shelly Sterling acordó la venta potencialmente récord con Ballmer después de comentarios racistas de Sterling a una novia, que fueron grabados y publicitados. La NBA se dispuso a expulsarle de por vida como dueño del equipo, y le impuso una multa de 2,5 millones de dólares.
Donald Sterling ha demandado a la NBA por mil millones de dólares en un tribunal federal, alegando que la liga violó sus derechos constitucionales, cometió infracción de contrato y violó las leyes antimonopolio. Sterling también ha contratado a cuatro empresas de investigación privada para que encuentren información comprometida sobre el anterior y el actual comisionado de la NBA, así los demás propietarios.
Si la venta no es completada antes del 15 de septiembre, la NBA podría llevar al equipo a subasta, dijo Pierce O’Donell, abogado de Shelly Sterling.
“La demora es el enemigo de este acuerdo. El Señor Sterling quiere matar el trato”, comentó a los periodistas.
El juez ordenó a los abogados que presentaran informes jurídicos a partir del miércoles.