News International anunció hoy que cerrará el tabloide News of the World después de que protagonizó un resonante escándalo por espionaje telefónico en Gran Bretaña.
James Murdoch, que dirige las operaciones europeas para la compañía matriz del periódico, dijo que el semanario de 168 años publicará su última edición este domingo. El escándalo costó prestigio al tabloide e hizo que decenas de empresas le retiraran sus anuncios.
LONDRES / Agencia AP
Murdoch dijo en un memorando al personal que todos los ingresos de la edición final, que no llevará publicidad, se destinarán a «buenas causas».
El anuncio tomó por sorpresa al ambiente de la prensa, así como al personal de la publicación.
El tabloide propiedad de Murdoch es acusado de haber interceptado los mensajes de teléfonos celulares de víctimas que van desde colegialas desaparecidas hasta familias en duelo, además de celebridades, personalidades de la realeza y políticos en procura de primicias resonantes. La policía dijo que estudia 4 mil nombres de personas que pueden haber sido blanco del semanario.
News of the World, que vende casi tres millones de ejemplares por semana, admitió que se infiltró en los mensajes de voz de teléfonos móviles de políticos, celebridades y asistentes de la realeza. Un reportero y un investigador privado que trabajaba para el semanario fueron a la cárcel por intrusión telefónica en el 2007.
Pero en los últimos días las denuncias se habían expandido para abarcar los teléfonos de niñas desaparecidas que fueron asesinadas, los familiares de víctimas de terrorismo y familias de soldados muertos en Afganistán.
James Murdoch, hijo de Rupert, afirmó que si las denuncias son fundadas, «ha sido inhumano y no tiene lugar en nuestra compañía».
La portavoz de News International, Daisy Dunlop, desmintió que The Sun, el periódico complementario de News of the World, que se publica de lunes a sábado, empezaría a publicarse todos los días para compensar la pérdida del tabloide que sale los domingos. Pero tampoco negó que pudiera hacerlo más adelante.
«Por el momento no es cierto», se limitó a decir.