Petróleos Mexicanos (Pemex) puso en venta casi la totalidad de sus acciones en la española Repsol, tras una etapa marcada por las tensiones entre ambas compañías.
Según un documento remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la empresa estatal mexicana puso en venta, mediante una colocación privada entre inversores cualificados, un paquete de 104 millones 057 mil 057 acciones de Repsol, representativas del 7.86 por ciento del total de 9.34 por ciento de su capital en la española.
La operación, mediante un procedimiento conocido como «colocación acelerada», la llevan a cabo Citigroup Global Markets Limited y Deutsche Bank por cuenta de Petróleos Mexicanos y PMI Holdings B.V.
El proceso de venta se da tras meses de desencuentros entre las directivas de ambas petroleras y después de que la cúpula de Repsol atribuyera a Pemex pretensiones de dividir a la compañía española en dos.
Las tensiones comenzaron en 2011, cuando Pemex se alió con Sacyr para reclamar cambios en la dirección. La alianza se rompió a principios de 2012 y ambas llegaron a un acuerdo de estabilidad.
En noviembre de 2013, Pemex criticó públicamente a la dirección de Repsol al considerar que los resultados económicos de su inversión en la empresa española no cumplían con sus expectativas.
El último episodio tuvo lugar en la junta de accionistas en marzo, cuando Repsol se encontró con el voto en contra de Pemex (el único) a la ahora de aprobar la modificación de los estatutos para fijar en el 75 por ciento los votos necesarios para cualquier cambio de relevancia.
La venta tiene lugar días después de que Repsol anunciara el pago a sus accionistas de un dividendo extraordinario de un euro por acción y en vísperas de la visita a España del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto.