Ryan Gosling debutó como director de cine en Cannes con una elegante fábula melodramática que los críticos se apresuraron a señalar con ferocidad.
La primera proyección de «Lost River» se realizó ayer ante una de las multitudes más grandes del festival, que presenció algo que no anticipaba. «Lost River» es un cuento de hadas barroco ubicado en las ruinas de Detroit, filmado con una cinematografía audaz y una atmósfera estridente al estilo de David Lynch.
La reacción inmediata de los críticos fue ampliamente negativa. Scott Foundas de Variety dijo que era un caso de «aires de grandeza llevados al extremo». Robbie Collin de The Telegraph la calificó como «asombrosamente mala».
Pero entre los asistentes también hubo elogios para «Lost River», que se presentó por la tarde antes de su función de gala. Algunos reconocieron que la película, a pesar de sus errores, era emocionante, ambiciosa y que Gosling le dio a las imágenes más atención de lo que la mayoría de los actores convertidos en directores suelen prestar.
Christina Hendricks («Mad Men») interpreta a una madre soltera, Billy, que tiene un niño pequeño y un adolescente llamado Bones (Iain De Caestecker). Viven en un edificio en ruinas en medio de los escombros de un barrio de Detroit donde no pueden pagar su hipoteca. Bones le teme al gánster de la zona, Bully (Matt Smith), mientras que Billy, en su desesperación por conseguir dinero, comienza a presentarse en un club nocturno del bajo mundo con actos sangrientos y terroríficos. (Eva Mendes, quien es la novia de Gosling, es una de las estrellas del club).
Gosling se ausentó de Cannes el año pasado porque estaba filmando «Lost River». En vez de llegar al estreno de «Only God Forgives» de Nicolas Winding Refn (una historia de venganza entre hermanos que también fue desecha por la crítica), envió una nota disculpándose por no poder asistir. Este año entró en la sección Un Certain Regard con «Lost River».
La influencia de Refn, quien también dirigió la cinta de suspenso «Drive», protagonizada por Gosling, se percibe fácilmente en «Lost River». Tiene un estilo visual melodramáticamente atrevido (el director de cámara fue Benoit Debie, quien trabajó para «Spring Breakers») y fue musicalizada por el mismo compositor de «Drive», Johnny Jewel.
Warner Bros., la distribuidora de la cinta en Estados Unidos, aún no ha anunciado la fecha de estreno de «Lost River», que previamente se titulaba «How to Catch a Monster».