El ministro danés de Relaciones Exteriores instó el martes a Siria a entregar las últimas armas químicas en su poder dentro de unos días para cumplir con la fecha límite del 30 de junio en la cual la nación envuelta en una guerra civil debe despojarse totalmente de su arsenal de esas armas letales.
Martin Lidegaard dijo que existen «serios problemas de seguridad» en relación con los 16 contenedores, algunos de los cuales tienen agentes utilizados para crear los mortíferos gases nerviosos VX y Sarín.
Pero el diplomático agregó que estos problemas pueden ser resueltos y que el gobierno sirio debe darles prioridad.
«Ese es el mensaje claro al gobierno sirio, que esperamos que entregue los últimos contenedores tan pronto como sea posible, esperemos que en unos días», dijo Lidegaard a bordo de un barco danés de carga utilizado para transportar los productos químicos fuera de Siria.
El barco, el Ark Futura, es parte de una flotilla danesa-noruega que incluye además dos barcos de guerra y otro buque de carga que ha estado sacando los agentes de Siria desde enero. Los agentes serán destruidos a bordo de un barco estadounidense.
Siria incumplió una fecha límite del 27 de abril para que fueran sacados todos los agentes químicos o destruidos en el país.
El Ark Futura y el barco noruego MV Taiko están actualmente anclados en aguas internacionales frente a la costa sur de Chipre esperando la orden para dirigirse al puerto sirio de Latakia a recoger el último embarque de productos químicos, representando 8% del arsenal sirio.
Lidegaard visitó tanto el barco de carga Ark Futura, como su escolta, la fragata danesa HDMS Esbern Snare, donde agradeció a los marinos por su trabajo.
Dijo que las embarcaciones danesas tienen la orden de permanecer en el lugar hasta el fin de junio, pero agregó: «no podemos esperar para siempre».
Cada uno de los barcos de carga tiene a bordo aproximadamente de 100 a 110 contenedores, llenos de agentes químicos para fabricar los gases VX y Sarín, así como agentes menos letales. Tres de los contenedores a bordo del Ark Futura están llenos de gas mostaza listo para ser usado, dijo el oficial Per Andersen, de la unidad Química, Biológica, Radiológica y Nuclean de Dinamarca, o CBRN.
Los contenedores están monitoreados las 24 horas del día según regulaciones estrictas emitidas por la Organización para la Prohibición de Armas Químicas, para asegurar que no representen un peligro para la tripulación, dijo Andersen.
El jefe de la unidad CBRN el capitán Jens Larsen, señaló que son necesarios ambos barcos de carga para recoger el último embarque y transportar por separado agentes que cuando se mezclan se crean los gases letales.