Una corte egipcia prohibió el martes a líderes del partido del derrocado presidente Hosni Mubarak de participar en elecciones de cualquier tipo, un fallo impreciso que podría impedir que ex funcionarios de ese régimen regresen a la política por ahora.
La prohibición se anuncia mientras Egipto se prepara para las elecciones presidenciales de finales del 26 y 27 de mayo. El ex jefe militar Abdul Fatá El Sisi, que derrocó al sucesor de Mubarak, el islamista Mohamed Morsi, es favorito a llevarse la mayoría de los votos. Las elecciones parlamentarias —cuando el fallo tendría un duro impacto, de mantenerse— están programadas para mediados de año, aunque no se ha fijado una fecha.
Muchos creen que ex funcionarios del periodo de Mubarak podrían ser una sólida presencia en las elecciones parlamentarias, dada la ausencia de los influyentes partidos de tendencia liberal y de la Hermandad Musulmana de Morsi y sus aliados islamistas, que dominaron en las elecciones de 2012 pero han sido acallados por fuerte medidas de seguridad desde el derrocamiento de Morsi.
La Corte de Asuntos Urgentes de El Cairo determinó que los líderes del Partido Nacional Democrático de Mubarak no pueden competir en ninguna elección presidencial, parlamentaria o de concejo municipal. La decisión es vinculante hasta que un tribunal emita un veredicto final sobre el tema. Es muy probable que una corte mayor anule el fallo debido a que viola un principio de igualdad de derechos políticos otorgado por la Constitución.
El fallo no define qué significa ser un líder de partido, lo que complica su implementación al comité de la próxima elección. Un caso previo de la corte por dejar fuera de la política a miembros del Partido Nacional Democrático durante cierto periodo fue declarado improcedente por la corte constitucional.