El presidente Barack Obama advirtió el sábado a Corea del Norte que Estados Unidos «no dudará en utilizar su capacidad militar» para defender a sus aliados, al exaltar la fuerza de su país en la región ante el incremento de la influencia de China y las impredecibles amenazas nucleares de Pyongyang.
Obama visita Seúl en momentos en que Corea del Norte ha amenazado con efectuar su cuarta prueba nuclear, debido a lo cual el mandatario estadounidense planteó la posibilidad de adoptar ulteriores sanciones.
«El compromiso que Estados Unidos ha contraído para la seguridad de la República de Corea se fortalece de cara a la agresión», declaró Obama en un discurso ante unos 28.000 efectivos estadounidenses destacados en Corea del Sur para vigilar al país vecino del norte.
«Nuestra alianza no se arredra cada vez que pretenden (en Corea del Norte) llamar la atención. Se gana el apoyo del resto del mundo», agregó.
De acuerdo con la publicación digital 38 North, que da seguimiento a las actividades de Corea del Norte, imágenes de satélites comerciales tomadas el miércoles mostraban un aumento de las maniobras de vehículos y materiales cerca de lo que se cree son las entradas a dos túneles completos en el lugar de pruebas nucleares de Punggye-ri.
Las maniobras podrían corresponder a los preparativos para una explosión atómica subterránea, aunque predecir una acción de este tipo es notoriamente difícil.
Obama ridiculizó el intento de Corea del Norte de hacer una exhibición de fuerza. «Cualquier puede hacer amenazas», declaró. «Cualquiera puede movilizar un ejército. Cualquiera puede exhibir un misil. Eso no significa que esa parte sea poderosa», apuntó.
Obama declaró que el verdadero poderío proviene de tener una democracia abierta participativa, mercados abiertos y una sociedad libre de expresarse contra su gobierno.