El Pulitzer y la democracia


edit-gonzalez

“La emisión de las ideas por la prensa debe ser tan libre, como es libre en el hombre la facultad de pensar.” Benito Juárez

“Los diarios The Guardian y The Washington Post fueron galardonados con los premios Pulitzer en la categoría de servicio público por sus informaciones sobre el espionaje estadounidense a raíz de las revelaciones del exanalista de la CIA Edward Snowden.

Edith González


La Universidad de Columbia reconoció al periódico británico por «encender un debate sobre la relación entre el Gobierno y el público sobre asuntos de seguridad y privacidad” con sus informaciones. En el caso del Post, el jurado aseguró que sus «informaciones acreditadas y reveladoras ayudaron al público a entender cómo las revelaciones se enmarcan en el marco más amplio de la seguridad nacional».
El Tiempo, Colombia, jueves 17 de abril 2014.

Estos  Pulitzer  no son para los periódicos galardonados. Son para la Democracia, pero ante todo para la sociedad  mundial que justo espera eso de la prensa. La verdad.   Aun cuando se tenga que enfrentar a los mandatarios del mundo y sistemas dictatoriales.

El dilema era, en su momento, si había  o no que dar a conocer las revelaciones del analista de la CIA, Edward Snowden que afectaban  la seguridad de Estados  Unidos. Privó lo segundo. Las sociedades  contemporáneas necesitan y exigen, conocer la verdad de quienes nos gobiernan porque al final de cuentas, nosotros, los electores, somos quienes les damos el visto buen para que atiendan al Estado y no queremos que  se sirvan del mismo.

El espionaje a nivel mundial desplegado por los Estados Unidos, no es nada nuevo, pero se produjo  una variante importante e inédita. Desde las mismas entrañas de ese monstruo, se conocieron los “malos hábitos” de nuestros vecinos al norte.

Edward Snowden decidió contar al mundo lo que estaba sucediendo y por supuesto el Tío Sam se puso en alerta mundial y apeló al castigo del  “responsable”. Sin embargo, los periódicos mencionados reciben el Pulitzer por divulgar lo que no se debía de divulgar.

Es innegable que  las revelaciones del exanalista de la CIA golpearon  la cabeza misma, al centro nervioso más dinámico de las naciones del mundo y sus acciones permitieron poner a  prueba de fuego  la Democracia, la que al  final ha sido la ganadora.

Seguramente en el futuro ríos de tinta en los impresos, imágenes  y audios en los electrónicos continuaran contando la historia del más grande espionaje desde el final de la  Segunda Guerra Mundial,  lo que  ha sucedido en las mismas barbas de los Estados Unidos, a manos de un ciudadano de ese país, que seguramente no tenía la menor idea de cuáles serían las repercusiones de sus actos.

Ahora,  sus acciones nos dejan claramente definido que la sociedad moderna  espera que los gobernantes sean  honestos con sus gobernados. Que no escondan acciones como este millonario espionaje a líderes del mundo, a líderes mediáticos, a líderes de grupos sociales y humanos.
 
Dejando claro que la Prensa aquí,  o al otro lado del mundo es la fuerza  más significativa de la DEMOCRACIA.