Han iniciado las entrevistas de la Comisión de Postulación a los candidatos para Fiscal General y Jefe del Ministerio Público y en de algunas de ellas han surgido los comentarios sobre la situación de la institución y la forma ineficiente en la que ha funcionado durante años.
Lo que no queda claro es si algunos de los candidatos lo han dicho como como crítica o como uno de sus aportes al sistema de justicia, porque es indudable que algunos de ellos, desde sus prácticas dentro de la fiscalía o en lo privado como abogados, han hecho el máximo esfuerzo para garantizar la impunidad, convirtiendo la persecución penal en un empeño inoperante.
Es muy importante que se conozcan los planes de cada uno de los candidatos, pero también es importante que se le dé un valor a lo que se ha realizado en el pasado para cambiar la trayectoria de una institución que por naturaleza, debe ser el punto de origen en la lucha contra la impunidad. Entendiendo la Justicia como el trabajo de toda una cadena institucional, es fácil entender que el punto medio es la fortaleza de una fiscalía eficiente, fuerte y profesional. Con ello, ambos extremos del proceso de la justicia pueden contar con las herramientas para luchar por derrotar la impunidad.
Pero cuándo se nota que hay esfuerzos bastante claros en retomar el control de una institución en la que se basa el terrible sistema de impunidad y corrupción del Estado, no podemos más que pedir que se haga un esfuerzo adicional para no solo escuchar las críticas de algunos que han sido responsables directos en el malfuncionamiento de la institución, sino que se evalúe la ruta a seguir para impulsar una reducción consistente del fantasma de las injusticias.
Hemos sido siempre claros y directos en decir que sin un esfuerzo sin límites y con energía en contra de la corrupción, será imposible detener todos los otros hechos de impunidad que nos marcan como sociedad. Esa es la tarea pendiente más grande de un Ministerio Público que al día de hoy es ciego para encontrar presidentes, ministros, secretarios y hombres de “empresa” que se han dedicado a saquear al Estado y utilizan la ineficiencia de la fiscalía para lograrlo.
Se les hace un llamado entonces a los comisionados a que evalúen bajo qué condición es que los candidatos hablan en las entrevistas porque hay muchos que plantean la situación del Ministerio Público, pero que puede que lo digan como uno de sus logros siendo parte de los grupos oscuros que secuestraron la justicia.
Minutero
El MP fue diseñado
para apañar la impunidad
y desde su origen fue amañado
para tal finalidad