Sucio silencio


Editorial_LH

La atención y las menciones sobre Taiwán han cambiado por la necesidad que tiene el organismo Ejecutivo de la aprobación de un préstamo por 50 millones de dólares para terminar el tramo carretero hacia el Rancho, mientras que los corruptores han mantenido un silencio que es tan sucio como las intenciones con que han comprado voluntades durante todos estos años de “relaciones” con Guatemala.


Como recordarán, ya hace varios días que se espera una explicación formal sobre la afirmación del expresidente Alfonso Portillo quien se declaró culpable ante la justicia estadounidense por lavado de dinero producto de un soborno taiwanés para que mantuviera la posición de apoyo del gobierno de Guatemala durante su mandato.

Pero los maestros de la manipulación han decidido que no se harán las explicaciones como se deben, sino como ellos quieren.  Y los guatemaltecos, calladitos, esperando. Mientras tanto, el presidente Otto Pérez Molina urge a que se presione al Congreso para que apruebe esos millones de dólares de nueva deuda para que podamos avanzar en un proyecto con el apoyo del gobierno asiático.

La pregunta es si esto cierra el capítulo que convenientemente se quiere quitar del tapete porque no solo es Portillo el involucrado y a muchos les urge que se acabe el tema para que “pasando a otra cosa” se deje de mencionar que la práctica de la compra de voluntades de los taiwaneses casi ha sido la normalidad y la tradición en nuestro país.

Recibir ahorita más préstamos de Taiwán nos hace preguntarnos cuántas voluntades van involucradas con este proceso o si por arte y voluntad divina se transparentaron sus formas de cooperación.

Lo que le recomendamos al presidente Pérez para evitar que vaya a ser acusado por una mala interpretación de la bondad taiwanesa, es que se asegure que no le vayan a enviar el cheque de cooperación de 50,000,000 de dólares a su nombre porque vemos que “por error” es una práctica que los no muy eficientes representantes del gobierno asiático cometen.

  Pero como en Guatemala casi todo se tapa a plata o plomo, este es otro caso en que vienen a somatar el dinero sobre la mesa y prácticamente todos quieren seguir su camino sin detenerse a recordar que tenemos casos delicados de soborno y el corruptor sigue siendo el “agente financista” para operaciones de inversión estatal.  Sería conveniente que mientras ellos no le den importancia a dar las explicaciones formales sobre su participación en la compra de voluntades, al menos un poco más de guatemaltecos les demostremos el desprecio que le tenemos al sucio silencio que mantienen.

Minutero
Que todo ese dineral
no sea en cheque personal;
¿será que los pobres chinitos
están haciendo pinitos?