En la jurisdicción municipal de Mixco, departamento de Guatemala, hay serios problemas para la comunidad por la falta de drenajes y del asfalto de las pocas y cortas calles y avenidas.
Los alcaldes que desafortunadamente ocuparon el sillón principal del edificio de la Comuna que ya va siendo no funcional por la inflada burocracia que dejaron los “ex” llevándose llenos los talegos, sólo promesas falsas de politiquientos hicieron hasta el atufo a la Asociación Pro Mejoramiento Integral del mencionado sector. ¡Farsantes e indignos de volver a mangonear!
El actual jefe del Ayuntamiento, Otto Pérez Leal, en cambio, sin ofrecer demagógicamente los drenajes y el arreglo de las vías de la pequeña Colonia, recientemente mandó a echar, provisionalmente, unas camionadas de piedrín mezclado con material oleaginoso que rellenaron los grandes hoyos que se formaron durante el pasado invierno. Ya parecían cráteres los hoyancos que dificultaban el tránsito de automóviles, motos, bicicletas y aun de peatones. Esos lagunajos eran agrandados por los “tráileres” y otros pesados vehículos que transportan montones de bultos con la materia prima de los empresarios de maquiladoras, lazos, etcétera, de la Colonia, quienes deberían colaborar en lo económico con las autoridades edilicias y el vecindario, para construir la obra de avenamiento y el arreglo de las vías que expeditaren la circulación de los livianos patas de hule. ¡Desdichadamente, algunos de esos señores no hacen nada!…
Pérez Leal, que dicho sea de paso, es hijo del Presidente de la República, general Otto Pérez Molina, ha ofrecido realizar las obras de drenajes y de asfalto de vías del sector de referencia que, como dejamos explicado en líneas precedentes, son de escasas dos cuadras y media y, más de alguna, de tres, a lo sumo. ¡Pero da grima pasarlas a pie o en carricoches en invierno y en verano! Se afirma que ya están programados los trabajos para realizarlos este año.
El día que cante gloria la población de la Colonia Cotió, los comunitarios estarán jubilosos y sabrán expresar su sincero reconocimiento al alcalde Pérez Leal, quien por su eficiente actuación podrá merecer la reelección para el próximo período cuadrienal. ¡Y no es cuento!
Los moradores de la Colonia Cotió consideran que tal sector está en peores condiciones que las de muchos lugares rurales de casi todos los departamentos de la República, pero ahora cifran sus esperanzas en don Otto Pérez Leal con el concurso de sus cercanos colaboradores.
Los trabajos en mención serían financiados con los millones asignados constitucionalmente a la Comuna en el presupuesto general de gastos de la nación.
¡Plausibles serán esas obras, alcalde Pérez Leal!!!