El Comité de Oxford para la lucha contra el hambre (Oxfam), advirtió que el cambio climático es la principal amenaza para la seguridad alimentaria en el país, puesto que podría tener consecuencias graves en la producción de los alimentos, repercutiendo negativamente en los casos de desnutrición detectados en la población infantil.
mrodriguez@lahora.com.gt
Un informe presentado por la organización no gubernamental Oxfam alertó que el cambio climático podría causar un retroceso en las políticas implementadas en la lucha contra el hambre, corriendo el riesgo de enfrentar una crisis alimentaria grave en los próximos meses a nivel nacional.
El documento detalla que producto de los efectos del cambio climático en el país, el precio de los alimentos incrementará este año hasta en un 2% y por ende, llevará a una crisis alimentaria grave, puesto que la demanda de los insumos aumentará en un 14 por ciento, a la vez que se considera que Guatemala no está lo suficientemente preparado para hacer frente a esta condición.
De igual forma, Oxfam coloca a Guatemala, junto con otros países de América Latina y el Caribe, como una de las regiones más vulnerables al fenómeno del Niño y por tanto más propenso a sufrir los efectos de sequías, inundaciones y otros riesgos relacionados.
Según el organismo internacional, el sector agrícola sufrirá los mayores impactos, en particular los pequeños agricultores que producen en promedio el 70% de los alimentos consumidos en el país. Asimismo, se calcula que aproximadamente el 20% de estos productores a pequeña escala son mujeres, poniéndolas en una situación de riesgo.
De acuerdo a la organización, estas condiciones traerían graves consecuencias económicas y sociales para el sustento del sector campesino y el abastecimiento agrícola, pues se estima que alrededor de 200 mil empleos temporales en la agricultura estarían desapareciendo por esta situación, si no se toman medidas urgentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Finalmente, se expone que la sequía ha “devastado” la cosecha de granos básicos del país, entre ellas la del café, haciendo que las familias guatemaltecas no tengan suficientes ingresos para comprar alimentos debido a la proliferación de la plaga de la roya.
Según el titular de la Secretaria Presidencial para la Seguridad Alimentaria y Nutricional, Luis Enrique Monterroso, se tiene previsto que el cambio climático pueda afectar principalmente a diez departamentos, entre los que ya se tiene identificado a Sacatepéquez, donde existe mayor incidencia en el manejo de fuentes de agua y saneamiento para la mejora nutricional de las familias.
“La vulnerabilidad climática que vive Guatemala nos pone en una constante situación de riesgo. Esto es lo que está evitándose paulatinamente. Es importante que cada vez más tomemos conciencia y llevemos acciones de manera preventiva”, dijo.