La calma regresó ayer al mercado bursátil neoyorquino luego de dos días de inestabilidad.
El índice Standard & Poor’s 500 se cotizó todo el día dentro de un rango de unos cinco puntos, aproximadamente un cuarto de punto porcentual, antes de finalizar ligeramente a la baja. Los inversionistas sopesaron un sondeo un tanto optimista sobre las contrataciones, algunos reportes sólidos de ganancias empresariales y un descenso en los precios del petróleo.
Las acciones se desplomaron el lunes y luego alcanzaron un récord en alza el martes al agudizarse las tensiones en Ucrania y luego disminuir.
«Estamos regresando a la normalidad», afirmó John Manley, jefe de estrategias de valores en Wells Fargo Fund Management. «Ahora el mercado está haciendo transacciones en base a los datos fundamentales de la economía, y éstos siguen siendo positivos».
El índice S&P 500 perdió 0,10 puntos, menos del 0,1%, para cerrar en 1.873,81, luego de que el martes estableció un récord en alza al cerrar en 1.873,91.
El índice industrial Dow Jones retrocedió 35,70 unidades, o el 0,2%, a 16.360,18, mientras que el tecnológico Nasdaq ganó seis puntos, o 0,1%, a 4.357,97.
Manley espera que la racha alcista continúe intacta siempre y cuando la Reserva Federal mantenga su respaldo de la economía y las compañías puedan seguir incrementando sus ganancias.