Momento de reflexión


Editorial_LH

Las Comisiones de Postulación han iniciado su trabajo y el entorno hace que se nos presente una coyuntura tan complicada y compleja como solamente en Guatemala puede suceder. La práctica de los rumores, las manos bajo la mesa, los poderes ocultos halando las cuerdas de sus títeres, hombres correctos acorralados por las sombras de la impunidad, etc.


En el 2014 tenemos que elegir a quienes integren la Corte Suprema de Justicia y magistrados para las Cortes de Apelaciones, reelegir o elegir en la Fiscalía General y Ministerio Público, el Tribunal Supremo Electoral, Contraloría General de Cuentas de la Nación en un ambiente que, al menos, podría calificarse como guión de una comedia barata o de una terrible película de terror. Ojalá, la pudiéramos convertir en una historia de compromiso y transparencia.

Porque aunque para algunos pareciera que en Guatemala no hay sorpresas, la misma muerte del Magistrado César Barrientos rodeada de un secreto que todos escuchamos sobre corrupción en la Corte Suprema de Justicia por la que habría recibido presiones inimaginables, la abierta manifestación de personas vinculadas a poderes ocultos sobre su intención de tomar control institucional del sector justicia y una larga fila de hechos, nos hacen pensar que será fundamental la decisión de avanzar en el proceso que hace unos años se planteó de enfrentar los muros de la impunidad o simplemente, retroceder y dejarnos capturar por los tentáculos del oscurantismo.

En estos días y por la repentina urgencia, el Congreso deberá elegir al sustituto de Barrientos Pellecer en la CSJ y, esperamos, sea alguien con la capacidad de escandalizarse y demostrar que no llega solo a ocupar una silla y cobrar un cheque sino que a llenar un espacio en el que, por hacer las cosas como se debe, las presiones se volvieron insoportables.

En esta tan famosa y convulsa coyuntura, es necesario redoblar esfuerzos para hacer el acompañamiento a las postuladoras con el fin de que se sientan arropados en caso de hacer el proceso público y transparente, pero que también sientan los ojos escrutadores y las voces denunciantes en caso de que decidan hacer las cosas como, lastimosamente, muchas veces se hacen en nuestro país.

A los actores principales entre los que, evidentemente, se incluye al Presidente Otto Pérez Molina, les pedimos que tomen un momento de reflexión para analizar el papel que juegan en lo que marcará el futuro de Guatemala. Que entiendan que no es por una decisión de coyuntura como deben sentenciar a nuestro país a pagar una condena de la que, posiblemente, no tendremos otra oportunidad de recuperarnos. Es un momento de reflexión y compromiso; es momento de decidir por Guatemala.
 

MINUTERO:
Sin excusa se quedarán
quienes hagan la selección;
saben que nos condenarán
si no hacen su reflexión