Javier Monterroso, secretario privado del Ministerio Público (MP), dijo que aún no se tiene una versión oficial sobre la muerte del magistrado César Crisóstomo Barrientos Pellecer, aunque según publicaciones de medios de comunicación, un fiscal dijo a periodistas que se trata de un suicidio.

Después de una jornada de informaciones imprecisas, medios de comunicación divulgaron que un fiscal, que habló con periodistas desde el anonimato, indicó que Barrientos se disparó un solo tiro en el cráneo y esa fue la causa de su muertem y la razón por la cual se encontró una herida por donde entró y salió una bala.

Sin embargo, Monterroso dijo que la institución aún no tiene una versión oficial sobre los hechos y esperará a contar con información precisa antes de divulgarla.

Mauricio López Bonilla, ministro de Gobernación, dijo a La Hora que es competencia del MP determinar cuál fue el móvil de la muerte del magistrado Cesar Barrientos.

Según el funcionario, no puede confirmar o descartar si hubo o no «mano criminal», ya que la Policía Nacional Civil en este caso solo interviene para documentar los hechos, y son el MP y la DEIC quienes investigan.

Sería muy prematuro formular una hipótesis en este momento, pues es necesario tomar en cuenta que también hace falta el estudio del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), dijo López Bonilla.

Familiares de Barrientos dijeron que no saben la causa de la muerte y prefirieron no adelantar opinión.

TESTIMONIOS

De acuerdo con los testimonios de los guardaespaldas de Barrientos, esta mañana, cuando se disponían a hacer una diligencia, el letrado les pidió que lo dejaran solo en el vehículo para hacer una llamada.

Luego, escucharon que se había accionado un arma de fuego y encontraron a Barrientos herido de gravedad.

Posteriormente fue trasladado con vida al Hospital de Mazatenango, donde minutos después falleció.

MUERTE CONFIRMADA

Gabriel Medrano, expresidente de la Corte Suprema, explicó que Barrientos realizaba una caminata junto a dos guardaespaldas cuando sucedió el hecho.

«Es terrible lo que ha sucedido, era una persona sumamente sensible, muy preparado y preocupado por el país y por la justicia especialmente en el país» dijo Medrano.

El magistrado era doctor en derecho y considerado uno de los impulsores de modernizar el sistema penal guatemalteco. Fue director de programas de modernización judicial y legislativa en Guatemala, Honduras y Nicaragua y ex director de la Escuela de Estudios Judiciales de Guatemala, de la Unidad de Transformación de Justicia Penal del Organismo Judicial de Guatemala.