Los príncipes Guillermo y Harry de Reino Unido se pusieron manos a la obra para ayudar a las víctimas de las inundaciones en Reino Unido, uniéndose a los soldados que asistieron hoy a los habitantes de viviendas amenazadas en el condado de Berkshire, confirmaron fuentes de palacio.
Los príncipes se unieron a los soldados a las 6:00 de la mañana (06:00 GMT) para construir defensas y ayudar a la gente a proteger sus propiedades con sacos de arena en Datchet, cerca de Londres.
«Quieren mostrar su apoyo a las víctimas de las inundaciones», dijo un portavoz de la casa real británica.
Los dos príncipes recibieron formación militar durante varios años y Harry es actualmente soldado. La Reina Isabel II donó pienso para animales para las granjas afectada en el condado de Somerset.
El primer ministro británico, David Cameron, prometió a los damnificados el apoyo del gobierno: se luchará «en todos los frentes», dijo a la televisión BBC.
El gobierno asumirá el coste de los sacos de arena y operaciones de ayuda del Ejército, dijo sin nombrar cifras concretas. A mediados de la semana ya había garantizado que el dinero no sería un problema en las operaciones de rescate.
Los meteorólogos pronosticaron para hoy y el sábado fuertes vientos que podrían convertirse en huracanes. En las regiones de Escocia e Irlanda del Norte podría haber tormentas de nieve. En el sur de Inglaterra, Gales e Irlanda decenas de miles de viviendas se quedaron hoy sin electricidad y al menos 5.000 se inundaron.
En la isla de Scilly la gente tuvo que refugiarse y en la costa de Gales continuaron registrándose olas de varios metros. Las autoridades advirtieron de los peligros de pasear cerca del agua.
Sobre todo en los condados de Somerset, Surrey, Berkshire y Gloucestershire es grande el peligro de que continúen las inundaciones. El Támesis lleva días provocando inundaciones en su cauce hacia Londres, y el nivel podría seguir subiendo. La capital londinense aún no se ha visto afectada.
Según Cameron, muchas empresas ayudan también a los damnificados. En algunos lugares las tiendas repartieron linternas, paquetes de comida o hervidores de agua. Dos grandes cadenas de supermercados pusieron a disposición sus camiones para devolver a sus granjas a animales perdidos y para suministrarles heno.
Desde hace dos meses partes de Reino Unido están afectadas por las inundaciones. Este invierno está siendo el más húmedo desde que comenzaran los registros meteorológicos en 1910. Para la próxima semana se pronostica una pausa: el domingo no lloverá. En lo que queda de febrero, «lloverá pero no en la dimensión de las últimas semanas», pronosticó Paul Davies, del servicio meteorológico.