El 2013 puede ser considerado como un año nefasto para la libertad de prensa en Guatemala, país minado por la fuerte infiltración del crimen organizado y las secuelas de la guerra interna, lo que sigue siendo altamente peligroso para los periodistas, señaló Reporteros sin Fronteras en su informe de 2013.
La organización resaltó que pese a ser un país pequeño, Guatemala reportó la muerte violenta de cuatro comunicadores (Jaime Napoleón Jarquín Duarte, Luis Alberto Lemus Ruano, Luis de Jesús Lima y Carlos Orellana Chávez), así como el asesinato del guardaespaldas de una directiva de televisión, Viltor García.
En América la profesión periodística se ha convertido en un acto heroico que se paga con la vida, afirmó la organización, que colocó a Guatemala en el puesto 95 de 179 países, en su Barómetro anual.
Durante el pasado año a nivel mundial fueron asesinados 75 periodistas, 87 más fueron secuestrados, 187 encarcelados, además que se registraron más de 2 mil agresiones contra profesionales de la comunicación y muchos debieron salir al exilio para salvaguardar su vida, señaló el estudio.
En la presentación del informe, la presidenta de RsF España, Malén Aznárez, señaló que Siria continúa siendo el país más peligroso para los periodistas; en esta nación fueron secuestrados 16 reporteros, entre ellos los españoles Marc Marginedas, Ricardo García Vilanova y Javier Espinosa; el año ha estado marcado esencialmente por el gran aumento de secuestros, más del doble del año anterior, afirmó.
Aznárez recordó el pedido realizado por el Secretario General de RsF, Christophe Deloire, quien había solicitado a la Unión Europea que el secuestro o ataque deliberado contra informadores, sea reconocido como “crimen de guerra” por el Tribunal Penal Internacional.
En el evento estuvo presente la periodista mexicana Verónica Basurto, quien se encuentra exiliada debido a amenazas de muerte por sus reportajes; Basurto dio a conocer que pese a cambiarse varias veces de domicilio y alejarse de su trabajo y amigos, no se alejó del peligro.
La periodista dijo que exiliarse significa quitarle peso de encima a cada gobierno, debido a que con esto “no existes en ese país”; la profesional además criticó que el mecanismo de protección implementado en México no es funcional.