El presidente Otto Pérez Molina dijo esta mañana que lamenta las presiones que Estados Unidos supuestamente ejerce entorno a las adopciones internacionales y el resarcimiento a las víctimas de Chixoy, a cambio de la cooperación.

El mandatario enfatizó que esos son temas internos. Primero hubo presión para una nueva Ley de adopciones y ahora que está vigente la nueva Ley, resulta que se habla en el Congreso de los Estados Unidos de esas mismas adopciones, expresó Pérez Molina.

“Aquí, nosotros tampoco somos juego de ninguno, y aquí nosotros vamos hacer las cosas que tengamos que hacer, cumpliendo con la Ley; eso quiere decir que a mí no me presionan con eso”, agregó.

Además, indicó que antes la crítica era que Guatemala exportaba niños y ahora la crítica es porque no se dan esas adopciones. “Nosotros no vamos a ser juguete de nadie y vamos a cumplir con las leyes, las disposiciones de aquí de Guatemala son las que van a decir a que paso van avanzar”, puntualizó.

En cuanto al tema de Chixoy, el mandatario indicó que hay claridad: son 30 años en los cuales ningún Gobierno hizo nada, nosotros hemos seguido un compromiso que firmó el Gobierno anterior que es un compromiso que no tiene sustento ni la fuente de financiamiento adecuado para poderlo hacer.

Además, afirmó que desde el año pasado se trabaja en un programa con la participación de estas comunidades.