El presidente de Uruguay, José Mujica, reiteró su voluntad de encontrar acuerdos con el gobierno de Argentina, con el que mantiene discrepancias en torno a una fábrica de pasta de celulosa instalada en una zona fronteriza, publicó hoy la prensa de Montevideo.
«Con los gobiernos a veces nos encontramos y a veces nos desencontramos. Pero nuestro deber es hacer un esfuerzo por tratar de buscar acuerdos», dijo el mandatario entrevistado por el diario local «La República».
«En algún momento tendremos que arreglar y si no arreglamos, los gobiernos cambian y los pueblos quedan. Del pueblo argentino no nos va a separar ni Dios. Así que vamos a estar juntos siempre», añadió.
El gobierno de Mujica autorizó a fines del año pasado a la empresa UPM a elevar de 1.2 a 1.3 millones de toneladas su producción anual de pasta de celulosa, contrariando la opinión de la administración de la presidenta argentina, Cristina Fernández.
La fábrica funciona en las afueras de la ciudad uruguaya de Fray Bentos, vecina de la provincia argentina de Entre Ríos. Su instalación, a fines de la década pasada, también motivó un diferendo bilateral con un trasfondo ambiental que se encaminó con la intervención de la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Acerca del Mercosur, Mujica insistió en la necesidad de resolver dificultades: «Estamos malheridos y vamos a tener que revisar lo que funciona y lo que no funciona. Y señalar los problemas con mucho énfasis».
Sin embargo, el mandatario valoró la importancia de la integración.
«Solos, desencajados en el mundo de hoy, no vamos a ninguna parte. No tenemos que medir y darnos cuenta de la fuerza que tenemos nosotros, sino darnos cuenta de la fuerza que tienen otros. Solamente cuando uno se da cuenta de la fuerza que tiene el mundo desarrollado entiende que tiene que juntarse con los vecinos», dijo.