Este año, parece que en la gala de los Goya volverán a reinar las risas, y no sólo por los chistes del maestro de ceremonias: dos comedias, «La gran familia española» y «Las brujas de Zugarramurdi», parten como favoritas con 12 y diez opciones a estatuilla cada una.
Daniel Sánchez Arévalo, que ya tiene un Goya como mejor cineasta novel por «AzulOscuroCasiNegro», podría coronarse también como mejor director por esta chispeante historia sobre una familia que celebra una boda el día que España ganó el Mundial de Fútbol de Sudáfrica, y que además opta al galardón como mejor película.
En la categoría reina, «La gran familia española» se enfrentará a la tierna «Vivir es fácil con los ojos cerrados» (David Trueba), los dramas «La herida» (Fernando Franco) y «Caníbal» (Manuel Martín Cuenca) y la cinta seleccionada para representar a España en los Oscar: «15 años y un día», de Gracia Querejeta. Todos sus directores, excepto Franco que compite en la categoría debutante, optan también a premio. Sin embargo, varios críticos expresaron su sorpresa cuando los actores Clara Lago y Quim Gutiérrez leyeron las nominaciones en la sede de la Academia de Cine en Madrid, pues Álex de la Iglesia y su disparatado aquelarre quedaron fuera en las categorías de dirección y película. Y eso pese a que «Las brujas de Zugarramurdi» fue uno de los títulos españoles más taquilleros del año.
También se fue de vacío el último trabajo del manchego Pedro Almodóvar, la comedia «Los amantes pasajeros», que pese a su buena recepción entre el público no contó con el beneplácito de la crítica y sólo compite en la categoría de vestuario. Sin embargo, sí figura entre las favoritas una de las cintas de ese género que mejor prensa (y de nuevo público) tuvo el año pasado: «Tres bodas de más», de Javier Ruiz Caldera.
Su protagonista, Inma Cuesta, repite nominación dos años después de «La voz dormida» con este divertido papel de soltera invitada a los enlaces de sus ex. Se enfrenta a Nora Navas («Todos queremos lo mejor para ella»), Aura Garrido («Stockholm») y Marián Álvarez, a quien su trabajo en «La herida» como una joven con trastorno límite de la personalidad ya le valió la Concha de Plata en San Sebastián.
Entre los actores protagonistas, parece que el duelo estará entre Javier Cámara como el entrañable profesor de inglés de «Vivir es fácil con los ojos cerrados» y el «Caníbal» Antonio de la Torre. Para ambos, es su sexta nominación, aunque De la Torre ya se llevó un Goya como intérprete de reparto por «AzulOscuroCasiNegro» y este año hace doblete en esa categoría con «La gran familia española».
Completan la lista de candidatos a mejor actor Tito Valderde («15 años y un día») y Eduard Fernández («Todas las mujeres»), mientras que entre los secundarios se suman Carlos Bardem («Alacrán enamorado»), Juan Diego Botto («Ismael») y Roberto Álamo («La gran familia española»). Como actrices secundarias destacan Maribel Verdú «15 años y un día» y la veterana Terele Pávez, la aterradora matriarca de «Las brujas de Zugarramurdi».
En el apartado de animación, la coproducción «Futbolín» («Metegol»), del argentino Juan José Campanella («El secreto de sus ojos»), compite con las aventuras medievales de «Justin y la espada de valor», la futurista «Hiroku y los defensores de Gaia» y «El extraordinario viaje de Lucius Dumb», sobre un científico que intenta convertir la Tierra en un lugar idílico.
Otra película argentina, «El médico alemán (Wakolda)» (Lucía Puenzo), opta al Goya a la mejor cinta iberoamericana, categoría en la que se enfrenta a la vitalista cinta chilena «Gloria» (Sebastián Lelio), el drama mexicano de inmigración «La jaula de oro» (Diego Quemada-Diez) y la ópera prima venezolana sobre la homosexualidad «Azul y no tan rosa».
Finalmente, la ajustada carrera entre los filmes que se disputan el premio a la mejor película europea está liderada por las dos últimas ganadoras de Cannes: la más reciente, «La vida de Adèle» (Abdellatif Kechiche), y la del año pasado «Amour» (Michael Haneke), compiten con la oda a Roma que firma Paolo Sorrentino en «La gran belleza» y el oscuro thriller danés «La caza» (Thomas Vinterberg).
Quien de momento ya tiene premio asegurado es el cineasta y guionista Jaime de Armiñán («Mi querida señorita»), que se llevará el Goya de honor. El resto tendrán que esperar al veredicto de los académicos, que llegará en la noche del 9 de febrero con una gala en el Hotel Auditorium Madrid conducida por el periodista y humorista Manel Fuentes.