Fue una fiesta solitaria en Marte. Con una sucesión de tonos, el vehículo robot «Curiosity» se tocó a sí mismo la canción de «Feliz cumpleaños» a comienzos de agosto, al cumplirse el primer aniversario de su llegada al planeta rojo.
«Si alguien en Marte escuchara atentamente con motivo de ese acontecimiento especial, oirá» la canción, comentó la agencia espacial estadounidense NASA.
En la Tierra, el aniversario fue muy celebrado. Desde el aterrizaje del «Curiosity» en Marte, la misión transcurre casi sin dificultades.
El vehículo robot se transformó en el favorito de los astrónomos, que volvió a mejorar la imagen de la NASA y sigue transmitiendo sin parar datos, imágenes e información.
El «Curiosity» recorrió más de 1.6 kilómetros sobre el planeta rojo, aguantó tormentas, superó problemas informáticos y cortocircuitos. Envió a la Tierra más de 190 gigabytes de datos y más de 37 mil fotografías. Usó unas 75 mil veces su aparato de láser y tomó además dos muestras de rocas de Marte.
Con todo ello se formó una montaña gigantesca de datos científicos que tendrán a los investigadores ocupados durante décadas. Pero además, la misión está lejos de haber terminado.
El proyecto, que costó 2 mil 500 millones de dólares y originalmente iba a durar dos años, fue prolongado hace tiempo «lo más posible». Lo principal es que el vehículo robot siga intacto, dijeron fuentes de la NASA.
El objetivo más importante de la misión, que es la búsqueda de indicios de vida pasada en Marte, ya fue cumplido hace tiempo por el «Curiosity».
En una pequeña palada de fragmentos rocosos, el «rover» descubrió entre otros azufre, nitrógeno, fósforo y carbono. Todos estos son elementos químicos que tienen un importante papel en la creación de vida.
A partir de esto se puede concluir, según la NASA, que podría haber existido vida en Marte. «Hallamos un entorno que en el pasado fue habitable», explicó el investigador principal de la misión «Curiosity» John Grotzinger en marzo. «Todos estamos entusiasmados y muy excitados».
El «Curiosity» también halló indicios de la existencia de un antiguo lago, en el que había condiciones para la presencia de vida.
El lago, que actualmente está seco, podría haber servido de hábitat para microorganismos hace miles de millones de años.
Sin embargo, es incierto si en el agua hubo realmente vida, ya que el «Curiosity» no halló indicios de vida en el pasado de Marte.
Además, el metano, un gas que puede dar indicios sobre actividad biológica actual o pasada, fue detectado en una cantidad menor a la esperada por el vehículo robot.
A largo plazo, el «Curiosity», que pesa unos 900 kilogramos y tiene casi 1.5 millones de seguidores en la red social Twitter, debe preparar el terreno para el viaje del ser humano al planeta rojo.
Hasta ahora, el «Curiosity» está prácticamente solo. Sólo su antecesor, el «Opportunity» se desplaza a cierta distancia y hay algunas sondas que orbitan el planeta.
A mediados de noviembre, la NASA envió otra sonda, «Maven», que deberá llegar al planeta rojo en septiembre de 2014 y analizar allí la atmósfera.
Para el año 2020, la agencia espacial planea el envío del «Curiosity 2.0» y posteriormente, en algún momento, al hombre.
«Los éxitos del ‘Curiosity’ nos hacen progresar», agregó el director de la NASA, Charles Bolden. «Las actuales huellas de ruedas nos conducen en el futuro a huellas de pisadas».