Un tercio de niños en el mundo no están registrados
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) reveló que los nacimientos de casi 230 millones de niños y niñas menores de cinco años no están registrados, lo que equivale a uno de cada tres infantes en este rango de edad en el mundo.
El documento “El derecho al nacer de todos los niños: Las desigualdades y las tendencias en el registro del nacimiento”, presentado por UNICEF en el marco de su 67 aniversario, reveló que a nivel mundial sólo el 60 por ciento de todos los recién nacidos fueron inscritos al nacer en 2012.
A decir de Geeta Rao Gupta, Directora Ejecutiva Adjunta de la entidad, el registro del nacimiento es algo más que un derecho, es la primera forma en que las sociedades reconocen y admiten la identidad y la existencia de un niño o niña.
La funcionaria internacional destacó que el registro del nacimiento es también clave para garantizar que no se olvide a la infancia, que no se les prive de sus derechos, ni se les oculte del progreso de sus naciones.
El informe, presentado por la entidad, analiza las estadísticas de 161 países y presenta los últimos datos y estimaciones disponibles de los países sobre el registro de nacimientos.
Rao indicó que a los niños y niñas que no son registrados al nacer, o que carecen de documentos de identificación, se les excluye con frecuencia del acceso a la educación, a la atención de la salud y a la seguridad social, si estos infantes quedan separados de sus familias durante los desastres naturales, los conflictos o como resultado de la explotación, la reunificación se hace más difícil.
El registro del nacimiento es vital para liberar todo el potencial del niño y la niña, ya que todos ellos nacen con un potencial enorme, pero si las sociedades no pueden contar con ellos y ni siquiera reconocen su experiencia, son más vulnerables ante los casos de abandono y abuso, lo que significa que su potencial queda gravemente reducido, según Rao.
UNICEF subrayó que la inscripción del nacimiento, como un elemento esencial del registro civil de un país, también fortalece la calidad de las estadísticas vitales y contribuye a la planificación y la eficacia del gobierno.
Los nacimientos no registrados son un síntoma de las desigualdades y disparidades en la sociedad, destaco Rao, quién también dijo que los países no podrán ser equitativos e incluyentes hasta que cuenten a todos los infantes.
Finalmente, UNICEF subraya que el registro del nacimiento tiene consecuencias duraderas, no sólo para el bienestar del niño y la niña, sino también para el desarrollo de sus comunidades y países.