El presidente del Instituto del Niño y el Adolescente (INAU) de Uruguay, Javier Salsamendi, dijo hoy en Montevideo que «habrá que precisar» la idea del presidente José Mujica de «agarrar» niños pobres para llevarlos a vivir a su predio rural en las afueras de Montevideo.
«No es lo mismo agarrar que adoptar» dijo Salsamendi ya que las reglas de adopción son claras y seguramente no será sencilla una adopción masiva de menores de edad.
Para el funcionario del instituto uruguayo, encargado de velar por los derechos de niños y adolescentes, «seguramente el presidente se refirió a una idea que no es nueva» y que es compartir su residencia particular.
Aún antes de ser presidente, desde el 1 de marzo del 2010, Mujica planteó públicamente su idea de hacer de su modesto predio una escuela de formación de oficios para ayudar a los sectores más necesitados.
Eso implica montar una institución de enseñanza que no tiene nada que ver con una adopción masiva. «Seguramente eso fue una conclusión del periodista que escuchó el comentario de Mujica» en una reunión con políticos y empresarios, precisó Salsamendi.
De acuerdo a la información publicada este fin de semana por un diario de Montevideo, Mujica expresó que tiene la idea de «agarrar 30 o 40 gurises (niños) pobres» y llevarlos a vivir con él y su esposa, la senadora Lucía Topolansky.
Interrogado por ese diario sobre cuándo planea hacerlo, Mujica contestó: «Cuando me saque este sayo que me pesa», aludiendo al cargo que ocupa desde marzo de 2010 hasta el 1 de marzo del 2015.
El titular del INAU recordó las normas vigentes en materia de adopción en el país y consideró que no hay que descartar que Mujica se proponga llevar también a jóvenes de 18 años y más para darles una oportunidad de formación.
Mujica no tiene hijos y vive en una modesta chacra que tiene en propiedad a las afueras de Montevideo donde se ha dedicado, aún siendo presidente, a la agricultura y el cultivo de flores.