A pesar de la poca afición salvadoreña que se hizo presente en el estadio Mateo Flores para observar el partido eliminatorio de su selección femenina Sub 17 ante su similar de Guatemala, la celebración catracha fue estruendosa por el triunfo 4-1 (global 5-1).
En el partido de vuelta, las chapinas tenían que superar a sus contrincantes por los menos con dos goles de ventaja para pasar a la hexagonal de la Concacaf (fecha pendiente) de camino al Mundial de Nueva Zelanda, debido a que en el partido de ida, cayeron 1-0.
Pero en vez de aprovechar la condición de localía, fueron las cuscatlecas las que terminaron por dar la sorpresa y clasificarse a la siguiente ronda.
Al principio de juego,las dirigidas por Benjamín Monterroso encerraron a las salvadoreñas en su terreno, hasta que descontaron por intermedio de Amanda Monterroso, quien puso a soñar a los aficionados.
Pero la respuesta de las visitantes no se hizo esperar y a los pocos minutos comenzó lo que terminaría en pesadilla para las guatemaltecas.
«Son un buen equipo, que supo aprovechar bien nuestros errores, además, llevan más tiempo trabajando que nosotros», anotó Mincho Monterroso.