El presidente venezolano, Hugo Chávez, colocó ayer, junto a su homólogo Daniel Ortega, la primera piedra de una refinerí­a en Nicaragua y entregó más de cuatro millones de dólares en créditos a cooperativas.

Chávez y Ortega colocaron en Piedras Blancas, a 8 km de Puerto Sandino, en el Pací­fico nicaragí¼ense, la piedra fundamental de la primera refinerí­a de Nicaragua, que se alimentará con petróleo venezolano y que pretende satisfacer las necesidades del paí­s y exportar hidrocarburos a Centroamérica y Estados Unidos.

«Estoy contento de estar colocando la primera piedra de esta refinerí­a que le hemos dado por nombre ’El supremo sueño de Bolí­var’», afirmó Chávez, quien aventuró que en «cuatro o cinco años ya estaremos trayendo petróleo venezolano por el Océano Pací­fico y Nicaragua no tendrá que importar ni un galón de gasolina más».

Con un costo de 4.000 millones de dólares, la refinerí­a se construirá en un plazo de seis años y tendrá capacidad para producir 150.000 barriles de petróleo diario que, según Chávez, generarán entre 600 y 700 millones de dólares netos de ganancias.

Este megaproyecto, que será ejecutado y administrado por Albaniza, una empresa conjunta de las compañí­as de petróleo de ambos paí­ses, creará unos 2.000 puestos de trabajo directos y 1.000 indirectos, agregó.

Chávez también anunció que con su aliado y anfitrión acordó analizar la posibilidad de construir dentro de la refinerí­a un complejo petroquí­mico para producir nafta, caucho para llantas de vehí­culos, plásticos, zapatos y tuberí­as para sistemas de riego.

Poco antes, el presidente venezolano habí­a anunciado la concesión de 4 millones de dólares en créditos para ocho empresas que pertenecieron al Estado en el anterior gobierno sandinista (1979-1980) y le fueron cedidas a los trabajadores que las administran en forma cooperativa.

«Estos créditos son a un 2% de interés, a un año de gracia y siete años para pagar» otorgados por Venezuela «para ayudar a levantar la producción de estas cooperativas», afirmó Chávez.

Los créditos serán facilitados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (Bandes) que recientemente abrió una oficina en Managua con una cartera de 20 millones de dólares.

Chávez, que no ha dudado en llamar «loros» y «lacayos del imperialismo» a la oposición nicaragí¼ense que lo critica de ser una mala influencia para Ortega, llegó el jueves a Nicaragua para participar en la celebración del 28 aniversario de la Revolución sandinista de 1979.

Chávez también se atrevió a hablar de reelección pese a advertir que no se querí­a «meter en cosas internas» de Nicaragua. «Pero ustedes no pueden dejar que (Ortega) se vaya más», opinó, tras considerar que cinco años son poco tiempo para profundizar los cambios en el paí­s.

«He venido a profundizar la relación con Nicaragua (…) hoy vamos a entregar un conjunto de instrumentos a través de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), a pesar que dicen que el ALBA es un papel membretado, ya verán», dijo.

Chávez, quien no dudó en estrechar las manos de la gente que se acercó a verlo, también anunció el compromiso de ayudar al Ministerio de Educación de Nicaragua para construir 200 aulas de clase para mejorar las condiciones de los centros públicos, que desde enero imparten la educación gratuita.

En su recorrido por varias localidades del occidente de Nicaragua, Chávez entregó de forma simbólica 4OO.000 mochilas con útiles escolares para estudiantes y 50.000 maletines con materiales de enseñanza para maestros nicaragí¼enses.

Entre los paquetes de asistencia a sectores productivos en Nicaragua también se contempla la entrega de 80 tractores de manufactura iraní­ ensamblados en Venezuela y que estarí­an llegando al paí­s, según anunció el gobernante.